Opinión: Trump insulta en lugar de refutar el cristianismo de hoy
Christianity Today llamó a la destitución del Presidente Trump, por lo que él tuiteó un insulto en lugar de una refutación. Lo cual, en realidad, es todo lo que sabe hacer.
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Una de las principales revistas evangélicas cristianas, Christianity Today, fundada por el difunto reverendo Billy Graham, pidió que el presidente Trump sea destituido de su cargo, esencialmente alineándose con los demócratas que han encontrado que el comportamiento del primer mandatario con respecto a Ucrania está más allá de los límites.
Esto es notable porque el apoyo principal de Trump incluye a muchos cristianos evangélicos que han estado dispuestos a pasar por alto sus obvios errores. (¿Pagarle a una estrella porno para encubrir una aventura? Seguramente a los evangélicos no les gusta eso). Lo han hecho porque está cumpliendo su promesa de cargar al poder judicial federal con jueces conservadores y enfocarse en asuntos de libertad religiosa.
Todo un trato del diablo.
Se espera que el presidente de EEUU sea absuelto en el juicio político que enfrenta
Christianity Today enmarcó la acusación como un movimiento partidista de los demócratas, pero también señaló que “los hechos en este caso no son ambiguos: el presidente de Estados Unidos intentó usar su poder político para obligar a un líder extranjero a hostigar y desacreditar a uno de los opositores políticos del mandatario. Eso no es sólo una violación de la Constitución; lo que es más importante, es profundamente inmoral”.
Luego, esto llegó fue el tema central, uno que debería resonar en todo el espectro político, pero que tantos republicanos no han podido reconocer.
“La razón por la que muchos no están sorprendidos por esto es porque este presidente ha acallado la idea de moralidad en su administración”, escribió el periódico. “Ha contratado y despedido a varias personas que ahora son criminales convictos.
Él mismo ha admitido acciones inmorales en los negocios y su relación con las mujeres, de las cuales sigue orgulloso. Nada más con su feed de Twitter, una cadena habitual de caracterizaciones erróneas, mentiras y calumnias, es un ejemplo casi perfecto de un ser humano que está moralmente perdido y confundido”.
Entonces, ¿cuál fue la respuesta de Trump? El bombardeo e insultos habituales (y una incapacidad, al parecer, para manejar un acrónimo simple).
Esto se está haciendo muy viejo.
Si el presidente tuviera un argumento convincente en contra de la acusación de Christianity Today, la cual espera que lo logre. Pero es incapaz de ofrecer una refutación razonada a la crítica. En cambio, se agita.
Los momentos cuando Trump ha atacado a alguien son dignos de mención. Pero a medida que su guerra contra sus críticos se expande, al igual que las filas de los mismos, el bombardeo se ha mantenido en un punto álgido.
Los candidatos presidenciales demócratas en el debate sobre quién podría vencer a Trump - un político experimentado o un forastero de Washington, un progresista o un moderado.
De hecho, sus respuestas se han vuelto no sólo predecibles: insulto, jactancia por algún logro (real o imaginado) no relacionado con el tema en cuestión, significan que el otro lado es algo menos que una encarnación malvada, sino más bien alguien irrelevante.
Su golpe de insultos, ataques y agravios inventados se han convertido en parte del ruido de fondo.
Curiosamente, eso también es lo que ©
Y eso no puede suceder lo suficientemente rápido.
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