Presupuesto para vacunas no se ha recortado en Hospital General de México

Querétaro (México) —  El Hospital General de México no ha sufrido recortes presupuestarios del esquema de vacunación para 2019, dijo este jueves la coordinadora de Internado Médico y Pregrado del nosocomio, María del Carmen Espinosa Sotero.

En el marco del Hexperience Summit “Juntos los protegemos”, que la farmacéutica Sanofi Pasteur organiza en Querétaro, centro de México, Espinosa negó que haya desabasto y confirmó que todas las dosis que se aplicarán este año están garantizadas.

México cuenta con uno de los mejores esquemas de vacunación en América Latina lo que ha permitido generar inmunidad, señaló la especialistas de este hospital de la Secretaría de Salud.

Destacó que el esquema ha sido fortalecido con la inclusión de la nueva vacuna hexavalente que protege contra seis padecimientos, entre ellos la tosferina y la hepatitis B.

Señaló que el esquema de aplicación de esta vacuna, se aplica a la edad de 2, 4 y 6 meses con un refuerzo a los 18 meses. “El esquema cubre al 100% y es lo más confiable”, dijo.

La hexavalente llegó al esquema de vacunación de México desde noviembre de 2018 y se aplica en Secretaría de Salud, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).

Las vacunas “son elementos tan cuidadosos que la producción es de acuerdo a lo que pide” el hospital o institución, señaló.

Explicó que por esta razón los laboratorios elaboran el número de dosis que se les solicitan y si hay una incremento súbito, la demanda no puede cubrirse de inmediato.

Gracias a las inmunizaciones cada año se evitan hasta tres millones de muertes, aún existen cerca de 20 millones de niños sin vacunar, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En México, el esquema de vacunación ha permitido la eliminación de enfermedades tan graves como la poliomelitis, además de que se han evitado brotes de padecimientos como el sarampión o difteria, que han surgido en otras naciones del continente.

“Si vemos el mapa se observa que estamos rodeados de casos, pero en el país no se han presentado porque tenemos buena inmunidad. El último brote de sarampión en México fue en 1992”, sentenció.

En México, en 1979 morían 55 de cada 1.000 niños nacidos, pero gracias a la formalización en 1973 del Programa Nacional de Inmunización, en 2010 se registraron 14 muertes por cada 1.000 pequeños.