Defienden actores belleza interior

MEXICO/AGENCIA REFORMA — Los integrantes de la obra La Estética del Crimen consideran que la aceptación hacia uno mismo es la clave del Éxito para cualquier proyecto en el que las personas se involucren.

Por ello, la actriz Michelle Rodríguez compartió que su sobrepeso nunca ha sido un impedimento para desarrollar lo que más le gusta, la actuación.

“Ha habido momentos, como todos, que nos vemos al espejo y hay cosas que no nos gustan. Creo que tenemos que vernos con más amor y aceptarnos tal cual somos.

“En la medida que nosotros nos sintamos cómodos en lo que somos, va a ser más llevadero el camino. Alguna vez alguien me dijo que hay que aprender a caernos bien porque vamos a estar con nosotros toda la vida”, afirmó en entrevista.

A pesar de que la imagen física no lo es todo, Montserrat Mararón dijo que sí debe cuidarse la forma en cómo alguien se proyecta, no tanto por agradarle a los demás, sino por gusto personal.

“(El exterior) Es importante, pero creo que es mucho más importante trabajar contigo interiormente, sí creo que mientras uno esté bien por dentro, puede verse bien por fuera.

“Evidentemente hay que verse decente, eventualmente con ciertas producciones y personajes, incluso en algunos trabajos se exige”, expresó Marañón.

Rodríguez, Marañón, Mario Alberto Monroy y Omar Medina acudieron a un spa de la colonia Juárez para dedicar unos minutos a su persona a través de los tratamientos de vapor y manicures, al tiempo que grababan promocionales para la obra.

“En una sociedad donde se juzga por cómo te ves, como te ves te tratan, si a ti te gusta lo que ves en el espejo esta· perfecto, mientras sea para agradarte a ti y no a terceros, es lo importante, pero no dependiendo de la aprobación de alguien más.

“Si yo me hago manicure es porque siento un apapacho, pero no porque quiero impresionar a los demás”, sostuvo Monroy.

En la puesta en escena, dirigida por Rina Rajlevsky en el Teatro Fernando Soler, los protagonistas son culpados de la muerte de Isabel Pratt, una famosa pianista.

El público es quien tiene la ˙última palabra y decidir· quién es el verdadero culpable del homicidio.