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Hospital público de Denver protegerá privacidad de inmigrantes y refugiados

Autoridades de Denver Health, uno de los mayores centros de salud en Colorado, aseguraron hoy en un comunicado que este centro hospitalario “es un lugar seguro para todos los pacientes”, incluidos los indocumentados.

“Protegeremos toda la información de los pacientes. La información personal está protegida por las leyes de privacidad de los pacientes y no se comparte ni con la policía local ni con el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE)”, a menos que exista una orden judicial al respecto, dice el comunicado oficial.

“Y no se permite que los agentes de las fuerzas del orden estén presentes en las áreas de tratamiento de pacientes”, agrega el documento.

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El comunicado viene debido a la confusión y el temor generados por las nuevas directrices migratorias del presidente Trump, que afectan a la presencia de indocumentados a los hospitales, y que también han causado que inmigrantes y refugiados dejen de denunciar delitos o de presentarse ante la corte.

“Las propuestas de cambios en las políticas migratorias de Estados Unidos han generado preguntas por parte de pacientes inmigrantes y refugiados, quienes quieren saber sus derechos y protecciones en Denver Health”, explica un documento emitido por el nosocomio.

Específicamente, las preguntas recibidas se refieren a “temas legales no relacionados con cuidados médicos, sino con la situación migratoria y con los derechos de los inmigrantes”, puntualiza el documento.

Un estudio nacional, publicado en febrero de este año por Denver Health y la Universidad de Colorado en Denver, encontró que los inmigrantes, especialmente aquellos sin presencia legal en el país, quedan generalmente excluidos de acceder a servicios médicos, por lo que solamente lo hacen y de manera parcial cuando enfrentan enfermedades crónicas, mayormente en sus etapas finales.

El estudio concluyó indicando que se deberían “reconsiderar” aquellas políticas de exclusión de inmigrantes de ciertos procedimientos médicos, porque generan “una cierta percepción del sistema de salud” que hace que los inmigrantes decidan no usarlo.

Según estadísticas oficiales de 2015 (año más reciente con datos completos disponibles), Denver Health atiende cada año a unas 208.000 personas, quienes reciben en total unas 953.000 consultas médicas.

Casi uno de cada cuatro de esos pacientes es de origen hispano y las hispanas (43.000), presentan el segundo grupo más numeroso de pacientes, siendo superado sólo por los hombres blancos (46.000).

Debido a privacidad no se divulgaron estadísticas de pacientes inmigrantes o refugiados, pero, según datos del Buró del Censo, el 16,1 % de los 682.000 residentes en Denver son extranjeros.

El documento de Denver Health invita a los inmigrantes y refugiados a no dejar de asistir a sus visitas médicas de rutina ni dejar de ir a la sala de emergencias si lo necesitan porque, de no hacerlo, “los pacientes podrían poner en riesgo la seguridad y protección de sus familias”.

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