Joven dice que el LAUSD tras denunciar agresión sexual
David R. Holmquist, consejero general en el Distrito Escolar Unificado de Los Angeles, a la derecha y GreG Mc Nair; ellos son dos de los abogados acusados de molestar e intimidar a una estudiante que denunció haber sido agredida sexualmente.
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Una estudiante quien alega haber sido agredida sexualmente en una escuela de Los Ángeles presento una queja en contra del distrito por negligencia, acoso y “conducta indebida”, la estudiante dijo que esto la traumatizó de nuevo.
La denuncia, interpuesta el miércoles de la semana pasada acusa a los abogados del Distrito Escolar de Los Angeles (LAUSD, por sus siglas en inglés), David Holmquist, Greg McNair, Jesús Meléndez y John M. Coleman de hacer una “campaña de acoso e intimidación contra Jane Doe”, dijo su abogado, Luis Carrillo. Estas acciones constituyen un esfuerzo para desalentar a la estudiante y a sus padres de continuar con la demanda que interpusieron en contra del distrito en el 2013, dijo Carrillo.
En la denuncia se refieren a la estudiante como Jane Doe, este nombre fue utilizado para proteger su identidad.
Los administradores del LAUSD se negaron a hablar sobre los detalles específicos de la denuncia, pero en un correo electrónico enviado a Los Angeles Times admitieron haberla recibido.
“Hemos hecho todo lo posible para satisfacer a su cliente, dijo Holmquist a través de su vocero. “Hemos tratado a la estudiante con respeto y hemos proporcionado servicios de profesionistas especialistas en la materia”.
El supuesto acoso es parte de una estrategia mayor que siguen los abogados del distrito, “diseñada para desalentar a menores y a sus padres de continuar con las demandas civiles que han interpuesto”, dice el documento.
La denuncia fue interpuesta el mismo día que la Corte de Apelaciones de California determinó que el distrito no puede culpar a una joven de 14 años por su propia agresión sexual o por presentar evidencia de la historia sexual previa, en el caso que involucra a su maestra.
La denuncia del pasado miércoles llegó poco después de que el distrito acordó incrementar a casi $175 millones de dólares el pago que se haría a los estudiantes que fueron abusados sexualmente en la Miramonte Elementary School. Carrillo fue uno de los abogados que representaron a los demandantes en el caso Miramonte.
El asalto alegado en la denuncia del pasado miércoles ocurrió en abril del 2012, cuando un desconocido entró al plantel y atacó a la niña en el baño, que en ese entonces tenía 12 años, dijo Carrillo. “El hombre le bajó los pantalones y la ropa interior tocándola por todo su cuerpo”, esto de acuerdo a la demanda que la familia interpuso contra el LAUSD. El Departamento de Salud Mental del condado llevó a cabo una valoración y detectó que la niña tenía miedo a quedarse sola y que cumplía con el criterio del Desorden de Estrés Post Traumático (PTSD, por sus siglas en inglés), dijo Carrillo.
Ella le dijo al doctor que no quería hablar sobre la agresión de la que había sido objeto. “No quiero llorar”, dijo ella.
La demanda acusa al distrito de haber fallado en proteger a la estudiante, de que no había supervisión suficiente y de que la seguridad no era la adecuada en el plantel. La demanda está pendiente.
En declaraciones hechas durante la averiguación previa en octubre del 2014, un detective del sheriff que estaba investigando el caso al ser interrogado por Carrillo reveló que la directora había sido evasiva y poco cooperativa durante la investigación.
“Ella quería desaparecerme”, dijo el detective, en una transcripción de las declaraciones de Carillo, que le fueron proporcionado al Times.
Carrillo dijo que esto incitó a los abogados del distrito para comenzar a presionar e intimidar a la joven y a su familia. “Cuando los sheriffs no estuvieron de su lado, ellos comenzaron la campaña”, dijo Carrillo.
Los abogados del distrito tomaron las declaraciones de la estudiante a lo largo de tres sesiones que sumaron un total de cuatro horas y 40 minutos, dijo Carrillo.
En septiembre del 2014 Carrillo habló con Coleman sobre el trauma emocional de la víctima, advirtiéndole que las preguntas que le habían hecho en la declaración la hicieron llorar y revivir desagradables momentos de la agresión. En la primera declaración en febrero del 2015, la víctima comenzó a llorar antes de que dieran inicio con las preguntas.
Según el informe citado en la demanda, en las dos primeras fechas de las declaraciones, la víctima “estaba emocionalmente incapacita para terminar con las declaraciones”.
Los interrogatorios terminaron en abril y la madre de la víctima siempre estuvo cerca. Coleman preguntó si podían proporcionarle una abogada para hacer las preguntas. Le dijeron que no había disponibles, de acuerdo a la denuncia.
Carrillo dijo que en julio el LAUSD designó a un hombre para hacer los interrogatorios, aun cuando el (Carrillo), había pedido expresamente a una mujer.
Un sicólogo que examinó a la estudiante en diciembre del año pasado, coincidió en que ella sufría de PTSD, dijo Carrillo, y que tenía un particular miedo a los hombres.
La demanda nombra específicamente a la miembro de la junta del LAUSD Mónica García, alegando que ella “permitió, condonó y ratificó”, que la estudiante volviera a sentir trauma causado por parte por un médico varón. Un representante de García dijo que ella (García), no estaba disponible para contestar.
Nadie fue arrestado por esta agresión, la estudiante ya no va a ninguna escuela del LAUSD, dijo Carrillo. Ella y su familia se mudaron del distrito.
El distrito sigue abierto para llegar a un “acuerdo razonable con la estudiante”, según su declaración.
De acuerdo a la declaración el distrito sigue abierto para llegar a un “acuerdo razonable con la estudiante”. Carrillo dijo que la familia tiene la intención de interponer una demanda con base a las nuevas denuncias.
Encuentre a Sonali Kohli en Twitter @sonali_kohli o por correo electrónico[email protected].
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