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¿Sandalias en enero? Altas temperaturas y fuertes vientos generan advertencias de incendios

A surfer rides a wave at the Huntington Beach Pier on Jan. 11.
Un surfista monta una ola en el muelle de Huntington Beach, el 11 de enero. Se espera que los vientos de Santa Ana aumenten nuevamente en medio de temperaturas casi récord.
(Allen J. Schaben / Los Angeles Times)

El clima inusualmente cálido volvió al sur de California esta semana y está creando condiciones de incendio peligrosas.

Se prevé que los vientos de Santa Ana aumenten su fuerza con ráfagas de hasta 50 mph en el condado de Los Ángeles, a medida que las temperaturas suban a 80 grados y la humedad caiga por debajo del 10%, según el Servicio Meteorológico Nacional.

La combinación de estos factores generó una alerta de peligro crítico de incendio para las regiones montañosas y los valles de los condados de Los Ángeles y Ventura. La advertencia comienza a regir a las 4 p.m. del jueves y permanecerá vigente durante al menos 24 horas. Habrá otro aviso separado durante las mismas horas para el interior del condado de Orange y las montañas de Santa Ana.

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Los vientos fuertes no son inusuales en esta época del año: la temporada de Santa Ana se extiende aproximadamente de octubre a febrero. Pero el clima veraniego es una anomalía, según David Sweet, meteorólogo de la estación Oxnard del Servicio Meteorológico Nacional. “Las temperaturas […] estarán cerca de los récords”, adelantó Sweet, y posiblemente llegarán a los 90 grados en algunas áreas.

El miércoles marcó 81 grados en Beverly Hills, la temperatura más cálida registrada en los Estados Unidos continentales ese día, según el Servicio Meteorológico Nacional. Además, se espera que las temperaturas aumenten este jueves y viernes. “Es hora de volver a sacar los pantalones cortos y las sandalias”, tuiteó el servicio meteorológico.

Una larga racha de sequía contribuye al riesgo de incendio, añadió Joe Sirard, otro meteorólogo de la estación Oxnard.

Salvo por una tormenta solitaria a finales de diciembre, ha habido pocas precipitaciones durante lo que suele ser la temporada de lluvias de la región. Eso genera una vegetación reseca, de la que el fuego puede alimentarse.

“Los combustibles permanecen muy secos”, dijo Sirard. “Si se produce algún incendio, podría tener una propagación rápida y el fuego un comportamiento extremo”.

Aún así, añadió que la sequedad “no es un caso sin precedentes”, y señaló ciertas condiciones similares que ocurrieron durante el mismo período el año pasado.

No se pronostica lluvia durante los próximos siete días, aunque hay un indicio de un posible cambio de clima a partir del próximo viernes y que durará hasta el fin de semana, posiblemente trayendo temperaturas más frías junto con la posibilidad de lluvia y nieve en las montañas. Sin embargo, Sirard enfatizó que el modelo se vuelve menos predecible más allá de una semana.

En el futuro inmediato, el servicio meteorológico aconseja tener precaución con las posibles fuentes ignífugas. En un aviso, el servicio instó a las personas a no quemar la maleza al aire libre o estacionar vehículos sobre césped seco, y a permanecer alerta alrededor de las parrillas calientes.

Se espera que los vientos disminuyan durante el fin de semana, pero es probable que recuperen fuerza a principios de la semana próxima, adelantó Sweet.

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