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Las autoridades dicen que no hay marcha atrás en la reapertura a medida que aumentan los casos de coronavirus

Free drive-up test for COVID-19 at Dodger Stadium
El tráfico fluye una vez más hacia el estacionamiento del Dodgers Stadium para una prueba gratuita de COVID-19 en Los Ángeles el 9 de junio de 2020.
(Genaro Molina / Los Angeles Times)

Los funcionarios de California siguen confiando en la rápida reapertura de la economía, incluso cuando las muertes por coronavirus y los nuevos casos continúan aumentando, diciendo que ahora no tienen planes para frenar estos esfuerzos.

Comentaron que esperaban que los casos aumentaran a medida que las empresas reabrieran, pero enfatizaron que las métricas generales aún respaldan la estrategia de reapertura, que dio otro paso importante el miércoles.

El condado de Los Ángeles anunció que los gimnasios y las instalaciones de acondicionamiento físico, estadios sin audiencias, campamentos de día, museos, galerías, zoológicos, acuarios, campamentos, áreas recreativas al aire libre y hoteles para viajes de ocio podrán reabrir a partir de hoy.

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Los salones de manicura, las tiendas de tatuajes, los bares y las bodegas, los cines, los teatros de espectáculos en vivo, los centros de entretenimiento, las salas de conciertos, los estadios, las arenas, las instalaciones de juegos, los parques temáticos y los festivales aún estarán cerrados en el condado.

La etapa de reapertura se produce cuando los funcionarios de salud pública del condado de L.A. reportaron 1.275 casos nuevos y 61 muertes adicionales relacionadas con el COVID-19.

A pesar de las restricciones levantadas, las fiestas, reuniones y mezcla de hogares aún no están permitidos.

“No, no estamos completamente fuera del problema, todavía nos encontramos en medio del problema y aún existe mucho riesgo”, expuso la directora de Salud Pública, Bárbara Ferrer. “Sé cuán desesperadas están las personas para poder volver a los eventos, pero eso no está en la orden de oficiales de salud del condado ni en la estatal”.

El martes, por segundo día consecutivo, el estado reportó más de 3.000 casos, elevando el número total de infecciones a una cifra mayor a los 137.000. La mayoría de los casos todavía están en el condado de L.A.

A pesar de la trayectoria ascendente de los casos y el creciente número de muertos, no hay planes para revertir el curso, señalaron las autoridades.

“A medida que incorporamos, de manera responsable, una reapertura de la economía, hemos dejado en claro que anticipamos un aumento en el número total de casos positivos”, manifestó el martes el gobernador Gavin Newsom al hablar con los líderes de la comunidad de Oakland.

“Pero también hemos dejado en claro el reconocimiento y compromiso concurrentes de que nos encontramos en un lugar sustancialmente diferente del que estábamos hace 90 días. Tenemos cientos de millones de mascarillas en nuestra posesión ahora”.

El gobernador señaló la mayor capacidad de pruebas del estado, la capacidad hospitalaria y el suministro disponible de ventiladores, métricas clave en la decisión de facilitar las modificaciones a nivel estatal, como un motivo para seguir adelante.

Diez condados: Fresno, Imperial, Kings, Tulare, San Bernardino, San Joaquín, Los Ángeles, Santa Clara, Sacramento y Ventura, están siendo monitoreados en el aumento del número de transmisiones u hospitalizaciones. El incremento en las cifras se ha relacionado con brotes en cárceles, prisiones y centros de ancianos, así como reuniones informales y formales en las últimas dos semanas, según el Departamento de Salud Pública de California.

A medida que se levantaron las restricciones después de casi tres meses de cuarentena, comenzaron las reuniones personales, a pesar de la prohibición continua de reuniones más allá de las protestas políticas o los servicios religiosos.

En el condado de Sacramento, un aumento en las hospitalizaciones durante el pasado fin de semana se vinculó con miembros del mismo hogar que se reunieron recientemente para fiestas de cumpleaños y un funeral. La Dra. Olivia Kasirye, oficial de salud del condado, dijo que muchas personas piensan que “estamos fuera de peligro”, a pesar de la realidad.

El condado de Ventura, uno de los primeros en relajar las restricciones de coronavirus en el Sur de California, experimentó un aumento similar en las hospitalizaciones durante el fin de semana, de 21 el viernes a 43 el lunes. Actualmente hay 39 individuos hospitalizados, 12 de los cuales están en cuidados intensivos.

El aumento estatal en el número de casos de COVID-19 no incluye ninguna propagación potencial por las protestas posteriores a la muerte de George Floyd, ya que el período de incubación del virus puede durar hasta 14 días. Pero los funcionarios temen que las manifestaciones conduzcan a otro incremento en el recuento de casos.

Si bien muchos en las protestas han usado cubiertas faciales, es casi imposible mantener una distancia de seis pies en la multitud. Los funcionarios están alentando a cualquiera que participó a hacerse la prueba y ponerse en cuarentena si se expusieron potencialmente a alguien infectado.

Los funcionarios estatales están trabajando con los líderes del condado para evaluar si sus jurisdicciones están listas para avanzar más en la etapa de reapertura.

En el condado de Los Ángeles, el más poblado del estado, los funcionarios están monitoreando la tasa de aquellos que dan positivo para detectar signos de un aumento en la transmisión. Además, los funcionarios estatales están proporcionando más recursos y equipos de protección personal a las 235 instalaciones de enfermería especializada del condado, donde las pruebas del personal y los residentes se han convertido en una prioridad después del escrutinio previo.

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