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Tiroteos entre la policía y enfermos mentales aumentan en Los Ángeles

Un informe de la policía de Los Ángeles reveló ayer que más de un tercio de las personas con las que los cuerpos de seguridad de la ciudad californiana mantuvieron un tiroteo en 2015 padecían enfermedades mentales, casi el triple que el año anterior, informó el diario “Los Ángeles Times”.

El estudio, que examina las circunstancias y detalles de los tiroteos de las fuerzas del orden ocurridos en Los Ángeles a lo largo del año pasado, apuntó que 14 personas de las 38 que fueron disparadas por la policía mostraron algún signo de enfermedad mental.

Este dato marca un fuerte crecimiento, dado que en 2014 fueron cinco los enfermos mentales implicados en tiroteos en la policía.

Si se mira la evolución de los últimos cinco años, en 2011 fueron cinco los individuos con problemas mentales que fueron disparados por los agentes; cuatro, en 2012; diez, en 2013; cinco, en 2014; y catorce, en 2015.

Por otro lado, la mayoría de las 38 personas que fueron tiroteadas por agentes en 2015 tenían ascendencia latina.

Asimismo, más de un quinto de los individuos que se vieron envueltos en tiroteos con los agentes fueron de origen afroamericano.

De acuerdo con las estadísticas del periodo de 2011 a 2015 acerca de las personas disparadas por la policía en Los Ángeles, se registraron 89 latinos, 52 negros, 25 blancos, 4 asiáticos y 4 sin determinar.

Por otro lado, 19 de las 38 personas relacionadas con tiroteos en 2015 portaban una pistola cuando se encontraron con los agentes.

De las 21 personas que murieron tras los tiroteos con la policía el pasado año, ocho de ellas estaban bajo los efectos de las drogas o el alcohol, según señalaron los estudios de toxicología.

Once agentes de Los Ángeles fueron heridos durante los tiroteos, más del doble que el año anterior.

El informe indicó también que doce personas murieron en 2015 mientras se encontraban en custodia de la policía, frente a las cuatro víctimas mortales ocurridas en las mismas circunstancias en 2014.

También apuntó que, del millón y medio de contactos con la población que tuvieron los agentes de la policía en Los Ángeles en 2015, menos de 2.000 resultaron en algún tipo de uso de la fuerza por parte de las autoridades.

La acción de la policía de Los Ángeles en algunos casos recientes ha generado críticas y controversia como, por ejemplo, la muerte de un hombre sin techo, por disparos de los agentes, ocurrida en marzo del año pasado en la conflictiva zona de Skid Row.

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