Si su teléfono, auto o alarma depende del 3G, prepárese para el apagón

Peatones pasan por delante de una tienda de AT&T.

Por Jon HealeySenior Editor, Utility Journalism Team

Feb. 3, 2022 7:12 AM PT

Share via
- Facebook
- X
- Email

Las redes 5G de las compañías de telefonía móvil están brindando más velocidad e innovación a los consumidores, pero hay una cuestión importante: para abrir las ondas de quinta generación, están cerrando redes más antiguas, que muchos dispositivos y servicios todavía usan.

Esas redes 3G anteriores fueron anunciadas como un avance revolucionario en ancho de banda y conectividad cuando debutaron en Estados Unidos, en 2002. Aunque las ondas de tercera generación comenzaron a dar paso al 4G una década más tarde, todavía brindan la columna vertebral para los teléfonos celulares más antiguos y una gran cantidad de otros equipos electrónicos.

En particular, 3G fue la red preferida para dispositivos que se comunicaban con otros a través de Internet, incluidas algunas alarmas contra incendios y robos, servicios de asistencia en carretera y mecanismos de alerta médica personal. Y se mantuvo funcionando porque los costos son bajos. Daniel Oppenheim, director ejecutivo de la empresa de monitoreo de alarmas y seguridad Affiliated Monitoring, afirmó que los componentes necesarios para conectarse a redes 4G eran demasiado grandes y costosos para muchos artefactos hasta hace poco, por lo que el hardware exclusivo de 3G siguió siendo ampliamente utilizado hasta hace un par de años.

Sin embargo, no era ningún secreto que el 3G finalmente se volvería obsoleto debido a una tecnología más nueva y eficiente que puede transmitir muchos más datos. AT&T notificó a sus clientes comerciales en febrero de 2019 que apagaría su red 3G dentro de tres años, obligándolos a ellos, a sus proveedores y consumidores a actualizar sus equipos.

AT&T, que opera una de las dos redes 3G más extensas del país, fijó desde entonces una fecha firme para la clausura: el 22 de febrero de 2022. Verizon, que maneja la otra, planea cerrar su sistema 3G para finales de año. T-Mobile prevé desconectar las ondas de tercera generación que maniobra, incluida la construida por Sprint, entre el 31 de marzo y el 1º de julio próximos.

El Comité de Comunicaciones de la Industria de Alarmas, una asociación comercial que representa a empresas como la de Oppenheim, solicitó a la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) que retrase el cierre del 3G hasta fin de año, argumentando que las interrupciones causadas por el COVID-19 han impedido que sus miembros actualicen aproximadamente dos millones de equipos de los consumidores. No obstante, si la fecha se demorara, el final de 3G es un hecho. Esto es lo que podría significar para usted, y lo que debe hacer desde ahora para prepararse.

¿Qué se verá afectado?

Los perjudicados más obvios del cierre de 3G serán los teléfonos antiguos, las tabletas y los relojes inteligentes que dependen del 3G para conectarse a una red móvil. La mayoría de estos dispositivos ya han sido enviados a la papelera de reciclaje de la historia; para ver si el suyo puede sobrevivir a la caída de las ondas de tercera generación de AT&T, consulte la lista que la empresa publicó en línea. Si no está en ella, tiene un problema.

Otros operadores enfrentan dificultades similares. Verizon no ofrece una lista completa de dispositivos compatibles, pero publicó ejemplos de teléfonos, tabletas y otros equipos populares que perderán conectividad. T-Mobile tampoco dio a conocer ninguna información detallada de equipos; en cambio, se comprometió a contactar a cada cliente que se verá afectado.

Tenga en cuenta que un dispositivo 3G con Wifi aún puede ejecutar sus aplicaciones y hacer casi todo lo que necesita, pero solo si está al alcance de una red inalámbrica de banda ancha abierta y no le importa hacer llamadas telefónicas a través de un servicio de protocolo de voz por Internet, como Skype. En otras palabras, su teléfono o tableta de ondas de tercera generación seguirán funcionando, pero no serán tan móviles.

Los consumidores estadounidenses reemplazan sus teléfonos inteligentes cada tres años o menos, en promedio, lo cual sugiere que quedan relativamente pocos aparatos 3G en uso. Sin embargo, el ciclo de vida es mucho más largo para otros dispositivos, incluidos los sistemas de alarma y seguridad que convocan a los primeros en responder en caso de robo, incendio, fuga de monóxido de carbono o una emergencia médica personal.

Si estos aparatos o servicios fallan por falta de conexión a la red, las consecuencias podrían ser trágicas. Oppenheim remarcó que las compañías involucradas trataron de reemplazar los equipos que funcionan solo con 3G de sus clientes, pero que la pandemia obstaculizó los esfuerzos de múltiples maneras. El COVID-19 redujo el suministro de componentes de reemplazo e interfirió con las tareas de instalación, dijo, en parte porque algunas personas no querían que los trabajadores ingresaran a sus hogares.

Como resultado, detalló, entre el 10% y el 15% de estos clientes no están listos para dejar el 3G. O su proveedor de servicios todavía no actualizó su equipo, indicó Oppenheim, o la persona no respondió los avisos enviados sobre el problema que se avecina.

Aquí hay otro inconveniente derivado de los largos ciclos de vida del producto: muchos automóviles pueden solicitar ayuda automáticamente después de un accidente o conectarse a un centro de llamadas con solo presionar un botón, gracias a un módem celular incorporado. Pero una parte de esos dispositivos de los vehículos se conectan solo a redes 3G.

El más crítico de estos servicios es la notificación automática de choques, que llama a los asistentes de emergencia inmediatamente después de una colisión lo suficientemente grave como para hacer que se desplieguen las bolsas de aire. Eso es especialmente valioso cuando el conductor está inconsciente o incapacitado y no hay nadie disponible para ayudar. Consumer Reports compiló una lista el mes pasado de los automóviles que se verán afectados; según la revista, “algunos vehículos solo necesitan una actualización de software o hardware, pero otros, incluidos varios de Chrysler, Dodge, Hyundai, Jeep, Lexus, Nissan, Ram y Toyota, perderán sus conexiones de forma permanente”.

Un ejemplo es BMW, que afirma que cerca de un millón de autos modelo 2018 y anteriores serán afectados. Jay L. Hanson, portavoz de la automotriz, expresó que algunos de esos vehículos serán elegibles para una actualización gratuita, y la compañía se ha puesto en contacto con esos propietarios. Por lo demás, los servicios ConnectedDrive y BMW Assist que venían con el automóvil ya no funcionarán.

Otro caso es el de la industria del transporte de carga por carretera, que depende de dispositivos de registro electrónico para cumplir con las normas de seguridad de los conductores y rastrear a los contenedores. Reemplazar todos los aparatos que dependen del 3G es un trabajo grande, que requiere mucho tiempo y que se complicó por la intensa demanda de servicios de camiones y la escasez prolongada de microchips.

Y esa es solo una lista parcial. Cualquier equipo que tenga más de unos pocos años y se conecte de forma inalámbrica y directamente a Internet podría necesitar una actualización de software o un reemplazo de su módem celular para seguir conectándose después de la clausura del 3G. Un ejemplo es la tobillera de control de alcohol que usan algunos delincuentes para asegurarse de que no vuelvan a beber después de ser liberados.

¿Por qué ocurre esto?

Las redes celulares transmiten datos a través de ondas aéreas alquiladas al gobierno federal. Aunque el 3G y el 5G usan diferentes tecnologías para enviar y recibir información, operan en algunas de las mismas frecuencias. Pero según AT&T, no pueden coexistir en ambas: las ondas de radio asignadas a los clientes de 3G tampoco se pueden usar para los consumidores de 5G.

AT&T le dijo a la FCC en agosto del 2021 que servir incluso a un usuario de 3G demandaría que la compañía reservara una parte significativa de sus ondas en la banda de 850 megahercios, a pesar de que los clientes de 3G usan colectivamente solo el 4% de la capacidad de la red 3G de AT&T. Desactivarlo permitirá a la empresa duplicar la cantidad de frecuencias de 850 MHz dedicadas a 5G, expusieron, mejorando enormemente su servicio para esos consumidores.

¿Qué debe hacer?

En la mayoría de los casos, los dispositivos que dependen de chips 3G brindan servicios por los que las personas deben pagar, ya sea la capacidad de realizar llamadas o convocar a la asistencia de emergencia de forma automática. Por lo tanto, las empresas que venden esas prestaciones ya se han acercado a sus clientes para ayudarlos a que todo siga en funcionamiento.

Es decir, si usted es uno de los afectados, probablemente ya haya recibido una carta o correo electrónico (o varios) que le informan cuál es el problema y cuáles son sus opciones. Si todavía no ha respondido, es buena idea hacerlo ahora.

Dada la cantidad de correo no deseado y spam que recibimos en estos días, es posible que haya desechado esas notificaciones sin pensarlo dos veces. Entonces, si posee un teléfono móvil, un reloj inteligente, una tableta, un dispositivo de alerta médica o un automóvil que tiene más de tres o cuatro años, o si cuenta con un servicio de alarma, consulte con su compañía telefónica, proveedor de servicios o fabricante del dispositivo para saber si se verá afectado y, de ser así, cuáles son sus opciones.

Hay mucha información en línea. Comience con la página 3G de su compañía de telefonía móvil (aquí hay enlaces para AT&T, T-Mobile y Verizon) y siga desde allí. El recurso más útil para la compatibilidad de teléfonos, tabletas y relojes parece ser la lista compilada por AT&T.

Numerosas empresas que venden sistemas de alarma y servicios de monitoreo advierten que no podrán actualizar todos sus equipos dependientes de 3G cuando AT&T apague su red este mes. La FCC todavía está considerando la petición de demora de la industria de alarmas; puede dar a conocer sus puntos de vista a través del sistema de archivo electrónico de la agencia, citando el expediente Número 21-304. Si cree que el corte es demasiado pronto, puede instar a sus representantes en la Cámara o el Senado de EE.UU a opinar.

¿Cuánto le costará esto?

Un portavoz de AT&T destacó que “una gran mayoría de los clientes” podrá obtener un teléfono de reemplazo gratuito para su dispositivo 3G. La compañía también ofrece celulares 5G a partir de 72 dólares.

T-Mobile indicó que los clientes de la red Sprint 3G podrán actualizar un nuevo dispositivo que funcionará en 4G y 5G de la compañía “sin costo alguno”.

Las personas con servicios telefónicos prepagos, sin embargo, están en una situación diferente. Las compañías móviles no suelen ofrecer teléfonos gratuitos con sus servicios sin contrato, por lo que cualquiera que tenga un dispositivo 3G tendrá que comprar uno nuevo, como Straight Talk Wireless, propiedad de Verizon.

Si tiene una tableta o reloj inteligente que depende de 3G, parece que necesitará adquirir un reemplazo si desea continuar conectándose a través de la red celular en lugar del Wifi. Ninguno de los sitios web de los operadores ofrecía sustituciones gratuitas de esa índole.

En cuanto a los sistemas de alarma y los dispositivos de alerta médica, Oppenheim señaló que es responsabilidad del proveedor de servicios actualizar el equipo para adaptarse al cambio en las redes, “por cierto, a un costo tremendo para la empresa, no para el consumidor”. Es similar al servicio de televisión por cable, donde la compañía del servicio es responsable de solucionar cualquier problema con sus cajas de cable, ejemplificó.