P.Rico impresionada por muerte de bebe cayó brazos del abuelo desde crucero

San Juan —  La muerte de una menor que murió este domingo al resbalarse de las manos de su abuelo desde un piso 11 de un barco crucero en la capital de Puerto Rico, ha impresionado a locales y turistas y ha provocado que las autoridades contemplen la posibilidad de presentar cargos.

Los hechos ocurrieron en el muelle Panamericano 2 de San Juan (próximo a la zona histórica de la capital) donde se encontraba atracado el crucero “Freedom of the Seas”, de la compañía Royal Caribbean .

Según informó Salvatorre Anello, abuelo de la menor de un año, a las fuerzas de seguridad, se encontraba en el piso 11 de la embarcación cuando sacó a la menor por una de las ventanas y se le resbaló de las manos, cayendo al pavimento del muelle y muriendo en el acto.

El propio secretario de Seguridad Pública del Gobierno de Puerto Rico, Elmer Román, indicó este domingo, en declaraciones a medios locales, que la información de que dispone es que se trata de la hija de un matrimonio de estadounidenses que viajaba en el crucero con otros familiares cuando se produjo el incidente.

Román no dio detalles de la razón de la conducta del abuelo ni de cómo cayó.

“Homicidios está aquí investigando”, sostuvo el funcionario, tras confirmar que las autoridades puertorriqueñas son las responsables de llevar a cabo la pesquisa del suceso una vez que el incidente tuvo lugar en territorio del Estado Libre Asociado.

Román adelantó que la investigación incluye el interrogatorio a los miembros de la familia de la menor fallecida, quienes se encuentran en territorio puertorriqueño después de que el barco zarpara anoche.

El funcionario subrayó que reciben atención psicológica dado el estado de nerviosismo en que se encontraban.

“Viajaban con la niña sus abuelos paternos y maternos”, precisó Román, que se desplazó personalmente al Puerto de San Juan para conocer de primera mano el estado de la situación.

Las autoridades locales, de momento, no han dado más detalles de lo sucedido y se limitaron a catalogar el suceso como un “incidente desgraciado”, aunque sin dar más datos.

El comisionado de la Policía, Henry Escalera, en declaraciones a a la emisora de radio WKAQ, reveló este lunes que el Departamento de Justicia contempla la radicación de cargos por negligencia aunque al momento no se ha detallado si serán en contra del abuelo o de la familia, naturales del estado de Indiana (EE.UU.).

Los padres están recibiendo atención psicológica desde que ocurriera el suceso.

El propio Anthony Maceira, Secretario de Asuntos Públicos de la isla, indicaba a través de su cuenta en twitter que la “tragedia” se está tratando con toda la “seriedad” y “sensibilidad” que requiere el asunto.

La embarcación que salió ayer de San Juan y tiene previsto regresar el día 14, se encuentra actualmente en Philipsburg (Sint Maarten).

Desde allí partirá hacia Basseterre (St. Kitts), San Juan (Antigua), Castries (Santa Lucía), Bridgetown (Barbados) y regreso a San Juan.

El psiquiatra de adultos, niños y adolescentes Mario González sostuvo en entrevista con Efe que la muerte de un niño es “una de las situaciones más difíciles” de sobrellevar en la vida.

“Es contra-natura y por eso es tan doloroso”, afirmó González sobre el lamentable suceso.

González sostuvo que el cómo enfrentar la situación, será una de las partes más difíciles para los familiares de la pequeña, en este caso.

Ante ello, González mencionó que la unión familiar es uno de los objetivos para que los afectados prosigan unidos en su núcleo de vida, específicamente de estos que disfrutaban de un tiempo de vacaciones juntos.

“De la forma en que fue este accidente, yo creo que es algo que hay que estar bien pendiente. También, en cómo trastoca la familia. Debe ser a base de un tratamiento que se evalúe a todos los miembros de la familia”, abundó.

Igualmente, González mencionó que otro mecanismo para ayudar a procesar el dolor es si algunos de los involucrados ostenta alguna creencia religiosa o espiritual y “cómo sostiene a la persona”.

De no ser así, todos los miembros de la familia tienen que estar consciente de los factores de riesgo, en especial, de algún intento suicida de alguno de ellos.

“Es un proceso de duelo que genera llanto y tristeza. Hay que ver cómo a largo plazo se pueda manejar cualquier sentido de culpa”, agregó el profesional, quien dijo también que cualquier testigo del evento también debe considerar buscar ayuda médica.

“Es bien importante, sobretodo, que no haya una peligrosidad. Que dentro de las emociones, que no desarrolle trastornos suicidas y que generen a otras tragedias dentro de la historia”, concluyó.