Trump cede a las crÃticas y ordena no separar a las familias de inmigrantes
Washington — El presidente, Donald Trump, intentó hoy frenar el aluvión mundial de crÃticas con un decreto que pone fin a la separación de los niños inmigrantes de sus padres en la frontera sur, pero no resuelve la situación de los más de 2.300 menores que ya han sido alejados de sus progenitores.
En lugar de ser separados de sus padres al cruzar la frontera, como ocurrÃa desde abril, a partir de ahora los niños indocumentados serán retenidos indefinidamente junto a sus familiares en centros de detención de inmigrantes, según la orden firmada por Trump.
“No me gustaba ver a las familias separadas ni los sentimientos que eso provocaâ€, aseguró Trump al rubricar el decreto.
El presidente no necesitaba usar su poder ejecutivo para acabar con la separación de las familias: PodrÃa haberlo hecho con una simple llamada a su fiscal general, Jeff Sessions, en la que le ordenara detener o modificar la polÃtica de “tolerancia cero†contra la inmigración ilegal, que originó el problema.
Esa polÃtica, inaugurada formalmente en abril, lleva a presentar cargos criminales contra cualquier adulto que cruza irregularmente la frontera con México, y el inicio de ese proceso por la vÃa penal llevaba a separarles de los niños con los que hubieran viajado.
Pero Trump no quiso acabar con esa polÃtica, que ha provocado la separación de al menos 2.342 niños de sus padres desde mayo y, en cambio, optó por ordenar que se empiece a ingresar juntas a las familias en centros de detención de inmigrantes u otras instalaciones de las que disponga el Gobierno federal.
El decreto abre incluso la posibilidad de que se detenga a inmigrantes en bases militares si es necesario, algo que se rumoreaba desde mayo y para lo que se están considerando, según informes de prensa, tres instalaciones en Texas y una en Arkansas.
“Mantendremos una frontera poderosa y seguirá habiendo tolerancia ceroâ€, aseguró Trump.
El presidente reconoció que tanto su hija Ivanka como su esposa Melania “tenÃan muchos sentimientos†acerca de la separación de los niños y se los han comunicado en los últimos dÃas.
“El dilema es que si eres débil, el paÃs quedará inundado de millones de personas. Y si eres fuerte, no tienes corazón. Quizá prefiero ser fuerte, pero es un dilema difÃcilâ€, indicó Trump.
A lo largo de la última semana, Trump habÃa defendido que el único que podÃa acabar con la separación de las familias era el Congreso, y hoy insistió en que sigue esperando un cambio en las leyes migratorias del paÃs que incluya fondos para el muro.
La oposición demócrata cree que el Gobierno de Trump decidió procesar criminalmente a los inmigrantes y separar a las familias precisamente para forzar al Congreso a ceder en sus prioridades migratorias, además de disuadir a los indocumentados de entrar en EE.UU.
Sea cierto o no, Trump ha conseguido devolver el debate migratorio al Congreso, y la Cámara de Representantes votará este jueves sobre proyectos de ley que otorgarÃan fondos para el muro con México, además de abordar la situación de los llamados “soñadoresâ€, jóvenes indocumentados que llegaron de niños al paÃs.
El decreto de Trump tiene un futuro incierto, dado que contraviene un acuerdo extrajudicial conocido como “Floresâ€, al que se comprometió en 1997 el Gobierno de Bill Clinton y que impide a las autoridades privar de libertad durante más de 20 dÃas a los menores indocumentados detenidos en la frontera.
Por eso, el Departamento de Justicia planea pedir a una corte federal de California que modifique el llamado “acuerdo Flores†para que el Gobierno de Trump pueda “mantener juntas a las familias durante todo el proceso†judicial relativo a los cargos criminales o el procedimiento de deportación, según el decreto.
El consejero de la FiscalÃa General, Gene Hamilton, defendió hoy que la orden de Trump es “claramente legalâ€, y dijo que, pese a su recurso a los tribunales, la Casa Blanca prefiere que el Congreso apruebe una ley que acabe con el “acuerdo Floresâ€.
El decreto de Trump no resuelve, por lo demás, la situación de los más de 2.300 niños que ya han sido separados de sus padres, porque el Gobierno no planea facilitar la reunificación familiar.
“Esto no se aplicará a los casos ya existentesâ€, aclaró Kenneth Wolfe, un portavoz del Departamento de Salud y Servicios Humanos -bajo cuya custodia están los niños-, a The New York Times.