Senadores demócratas reclaman a Congreso menos presupuesto para deportación
Washington — Senadores demócratas reclamaron hoy al Congreso que reduzca la financiación del presupuesto del presidente, Donald Trump, destinada a las deportaciones y a la construcción del muro en la frontera con México.
En rueda de prensa telefónica, los senadores demócratas Bob Menéndez, de Nueva Jersey; Kamala Harris, de California, y Mazie Hirono, de Hawai, con el apoyo de activistas e inmigrantes, anunciaron que enviaron una carta al Comité de Apropiaciones de la Cámara Baja para denunciar el gasto “desproporcionado” del presupuesto de inmigración propuesto por Trump para 2018.
“El presupuesto sigue la agenda de deportación masiva de Trump y estamos decididos a luchar para que no separe a las familias, a los niños estadounidenses de sus padres, a los ‘soñadores’ y los que trabajan duro en este país desde hace años”, aseguró Menéndez.
El senador dijo que las medidas son “devastadoras” y crean un “dolor innecesario”, ya que se centrarán, defendió, en perseguir a personas que no han cometido ningún delito y en construir un muro “innecesario”, por lo que pidió que el Congreso actúe.
El presupuesto del presidente Trump contempla recortes en programas sociales para financiar un aumento en seguridad fronteriza en el año fiscal 2018 (de octubre de 2017 a septiembre de 2018).
La propuesta presupuestaria incluye un aumento de 4.700 millones de dólares (un 7,1 %) para el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por su sigla en inglés), sobre todo para las agencias migratorias y fronterizas.
El DHS aumentaría así su presupuesto hasta los 70.692 millones de dólares, frente a los actuales 65.979 millones.
El documento propone un aumento de 2.913 millones para la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), e incluye partidas para contratar más agentes para la Patrulla Fronteriza y para iniciar la construcción del muro con México.
La propuesta también incluye un aumento del 29,4 % (1.802 millones) para el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés), así como del 23,2 % (835 millones) para el Servicio de Ciudadanía e Inmigración.
El presupuesto del ICE contempla también 2.700 millones de dólares (1.242 millones más) para mantener 48.879 plazas en centros de detención para adultos y 2.500 en otros para familias.
El Gobierno de Trump también proyecta que el muro en la frontera sur cubra alrededor de la mitad de los más de 3.000 kilómetros de territorio limítrofe con México, algo que según el Departamento de Seguridad Nacional, costaría más de 20.000 millones de dólares.
“Enviamos la carta a la comisión porque tiene la responsabilidad de que cuadren los números y creemos que pueden mirar este asunto como algo alejado de la ideología política de campaña. Esperamos que sean razonables, ya que el presupuesto no cumple con el objetivo de una mayor seguridad”, dijo Harris .
Por ello, defendió que es fundamental que se escuchen las voces “altas y claras” contra estos cambios en el gasto federal, para que las acciones “contra los inmigrantes” no ocurran en silencio y sin que nadie se dé cuenta.
Para Hirono, el presupuesto de Trump para 2018 muestra “el fervor antiinmigrante” de su Gobierno y la “despreocupación” por las familias y las comunidades, y defendió la necesidad de organizarse para detener las pretensiones del presidente.
Por su parte, la directora de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los Ángeles (CHIRLA), Angélica Salas, dijo no poder permitir que Trump “persiga, detenga y encarcele” a inmigrantes con un presupuesto que no refleja los valores y el respeto a las aportaciones de este colectivo a la sociedad.
La propuesta presupuestaria es más una declaración de prioridades políticas que un documento económico, ya que debe aprobarlo el Congreso y ha sido criticada tanto desde la bancada republicana como de la oposición demócrata, lo que le augura poco éxito.