¿Debería preocuparte el mercurio en tus dientes?
Foto de archivo de un estudiante de odontología instalando amalgama en un set de dientes de práctica.
No hay duda en la mente de muchos consumidores de que el mercurio es un peligro ambiental; muchos evitan comer pescados, como el atún, conocido por tener un alto grado de neurotoxina. Mientras que numerosos estudios han vinculado la exposición fetal e infantil del mercurio al deterioro del desarrollo del cerebro y del sistema nervioso, la reciente supervisión de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) ha demostrado que la mayoría de los estadounidenses tiene niveles de mercurio por debajo de los asociados con los efectos negativos para la salud.
Los vínculos entre los niveles de mercurio y el cáncer han sido demostrados en los estudios con animales. “Ningún dato humano indica que la exposición a cualquier forma de mercurio produce cáncer, pero los datos humanos actualmente disponibles son muy limitados”, afirma la EPA.
La mayoría de los ecologistas están de acuerdo en que el mercurio que se encuentran en el pescado proviene principalmente de los residuos industriales. Pero Joseph Mercola, un médico en osteopatía de los suburbios de Chicago quien investiga y escribe sobre la salud alternativa, se encuentra entre las personas que creen que los residuos de los empastes de amalgama de mercurio llegan al agua a través de una eliminación incorrecta de los residuos dentales, los desechos humanos y a través de la cremación.
La EPA está de acuerdo en que hasta la mitad de la contaminación ambiental por el mercurio proviene de los residuos dentales, y la agencia está trabajando hacia una regulación que requiera que las oficinas dentales utilice separadores que retiren los metales de las aguas residuales dentales.
Las amalgamas de mercurio han sido prohibidas en tres países, Noruega, Dinamarca y Suecia, después de que algunos estudios indicaran que los niveles de mercurio en el tejido placentario y fetal correspondieron directamente al número de empastes de mercurio de las madres, y una reciente comisión consultiva de la Administración de Alimentos y Medicamentos recomendó una prohibición similar en este país, debido a la falta de una investigación clínica que demostrara la seguridad de los empastes de amalgama.
Y aunque cientos de estudios han demostrado los peligros del envenenamiento por mercurio, se necesita más investigación para determinar si el vapor de mercurio de las amalgamas es perjudicial y si el retiro haría una diferencia.
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