A veces, los latinoamericanos se encuentran en los lugares más insospechados. El domingo pasado, cuando fuimos a cubrir la ceremonia número 82 de los Globos de Oro en el Beverly Hilton de Beverly Hills, sabíamos ya de la existencia de “Vermiglio”, la cinta italiana que participaba en la competencia por la Mejor Película en Habla Extranjera, y conocíamos incluso su trama.
Lo que no sabíamos es que el mismo filme, que se puede ver desde diciembre en un cine de Los Ángeles y que agrega desde mañana otro, estaba relacionado directamente a Argentina, una nación sudamericana en la que existe una enorme comunidad de ascendencia italiana pero que, por supuesto, no está involucrada habitualmente en los quehaceres de la industria cinematográfica que se desarrolla en esa parte del mundo.
Narrativamente, “Vermiglio” no tiene nada que ver con Sudamérica. Se desarrolla en un pueblo pobre pero encantador del norte de Italia, a mediados de los años ‘40 -es decir, casi al final de la Segunda Guerra Mundial-, para presentarnos a la familia del único maestro de escuela de la zona, cuya existencia se ve particularmente afectada tras la llegada de dos hombres que han abandonado el servicio militar y que, por ello mismo, no son vistos con mucha simpatía por los habitantes de un lugar marcado por el tradicionalismo.
Sin embargo, nuestra percepción de la cinta -que es ciertamente excelente- se hizo todavía más positiva luego de conocer en la alfombra roja de la ceremonia de la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood a la directora y al productor del trabajo, que tiene además un papel secundario como actor en el mismo.
Es él, justamente, quien tiene la conexión más directa con nuestra comunidad, porque Santiago Fondevilla -así se llama- nació en Buenos Aires y sigue trabajando por allá, aunque, en los últimos años, ha dividido su tiempo entre su tierra natal y el territorio europeo, con la finalidad de desarrollar proyectos que adquieran alcance internacional.
“‘Vermiglio’ está representando a Italia, pero tiene un gran corazón latinoamericano”, nos dijo el actor y productor. “Interpreto en ella a Attilio, un fugitivo de la guerra que lleva al pueblo al soldado protagonista, Pietro [interpretado por Giuseppe De Domenico], quien después se enamora de Lucia [Martina Scrinzi], una de las hijas del maestro [Tommaso Ragno”].
“Tras haber estado en el campo de batalla, mi personaje queda más o menos mudo y no puede expresarse más allá de los ojos”, agregó. “Fue una gran desafío contar mi parte de la historia casi sin diálogos debido a las consecuencias de los que hoy llamaríamos Estrés Post Traumático, un término que no se empleaba en esa época”.
La argentinidad tampoco es ajena a la directora y guionista del trabajo, Maura Delpero, que nació en la ciudad italiana de Bolzano, pero estudió Dramaturgia y Guión en Buenos Aires y que, de hecho, hizo su primera película de ficción en el país gaucho. Nos referimos a “Hogar” (2019), un contundente drama basado en los hospicios reales de la capital argentina que albergan a hijos de madres solteras.
En el caso de “Vermiglio”, la realizadora optó por un relato que tiene que ver directamente con sus orígenes, como nos lo contó ese día. “Mi padre vino del lugar que aparece en la película, y era parte de una familia numerosa conformada por 10 personas”, relató. “Cuando falleció, quise hacerlo vivir un poco más a través de mi obra”.
Pese a la importante nominación a los Globos de Oro, el veredicto final no favoreció a “Vermiglio”, sino a “Emilia Pérez”, la celebrada y a la vez controvertida apuesta francesa, que cuenta una historia de narcotráfico y transexualidad supuestamente ubicada en México, pero filmada completamente en París.
De todos modos, durante la entrevista que nos dieron, Delpero y Fondevilla se mostraron satisfechos por haber sido considerados en este evento y por lo que ello podría significar en términos lo que viene (es decir, el Oscar), pese a que las decisiones de la Prensa Extranjera no tienen influencia en las de la Academia.
“Estamos atravesando un momento increíble, porque esto se siente como una pre selección para el Oscar”, nos dijo la realizadora. “Ya estamos en la ‘short list’, y esperamos ser finalmente nominados”.
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“Vermiglio” es una película marcada por una puesta en escena tan sosegada como inspirada, así como por el interés que muestra en unos condicionamientos morales y en unas duras condiciones de vida que se sienten profundamente reales y que no se limitan al pasado, incluso cuando los trámites se desarrollan en ambientes bucólicos que aparecen bellamente retratados.
Estará disponible desde este fin de semana en un par de salas locales (Laemmle Glendale y Laemmle Royal), aunque es de esperar que los aterradores incendios que recorren esta parte del estado afecten su taquilla.
Sea como sea, hace unos días, los involucrados en la producción se encontraban emocionados con la difusión que estaba teniendo en nuestras costas. “Me acaba de comentar el distribuidor americano que tuvo un subidón después de su estreno”, dijo Delpero. “Ha sido por el boca a boca, como le decimos nosotros”, concluyó Fondevilla.
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