El qué y porque desde Washington: Los latinos son republicanos… pero aún no lo saben
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WASHINGTON.- — En 1984 Lionel Sosa, el genio de la publicidad y la mercadotecnia, nacido en Texas manejaba la campaña Latina de reelección del presidente Ronald Reagan, y fue entonces que el presidente acuñó la frase que hoy nos da la cabeza de la columna.
Años después, el mismo Lionel en una entrevista que le hice para la televisión, mientras manejábamos por la avenida Constitución en Washington DC, reflexionando acerca de ese momento, me contó que conociendo a fondo a nuestra comunidad nacional latina en Estados Unidos, el siempre había intuido que el potencial de que el partido republicano atrajera a una enorme parte del voto Latino era solo cuestión de tiempo.
Yo francamente no lo creí, pero hoy millones de Latinos han empezado a dejar de beber el Kool-Aid demócrata. Lo peor para los dirigentes demócratas es que a pesar de que esto ha ocurrido, poco a poco por mas de una década, o aun no se dan cuenta de su error, o simplemente decidieron no pelear por retener a ese enorme voto latino que sigue creciente en grandes número todos los días.
En el 2016, otro profesional Latino clave, Mark Hugo López, jefe demógrafo del Pew Hispanic Center en Washington, puso en términos estadísticos lo que Lionel había usado en sus campañas de publicidad más de 20 años antes. En un estudio llamado “Older and foreign-born Latino voters are more conservative in their political views”- “Los votantes Latinos mayores son más conservadores en sus principios políticos” Mark basándose en encuestas y estadística nos dio la siguiente información.
… “Aproximadamente un tercio (32%) de los votantes latinos registrados describen sus puntos de vista políticos como conservadores, mientras que el 36% dice que son moderados y el 28% dice que son liberales”. Y mas adelante en su estudio agregó;
… “Los votantes latinos registrados que predominantemente hablan español, son más propensos, que los que hablan solo inglés o son bilingües, a decir que son conservadores”.
Eso nos trae al 2021 y nos pone en la antesala de uno de los mayores cambios políticos que estamos viendo en Estados Unidos, en donde efectivamente mas del 30 por ciento de los votantes hispanos han optado por políticamente virar a la derecha y votar por los republicanos en las elecciones presidenciales. Lo mas sorprendente es que el año pasado el número de latinos votando por Donald Trump y por candidatos de la derecha aumentó ligeramente. Seguro que usted recuerda cuán sorprendidos quedamos todos de ver qué tanto Latino estaba comulgando con los republicanos.
Muchos artículos en la prensa apuntaron que esto era de esperar, y que ese cambio sería radical y podría transformar a los dos mayores partidos políticos del país.
Esto ya llevó a un escándalo en Texas, debido a que el representante estatal Ryan Guillen, que ya era considerado en la capital tejana como uno de los mas influyentes latinos conservadores del partido demócrata, rompió con su partido después de que sus compañeros demócratas de cámara se opusieran a que la gente en Texas porte armas de fuego sin requerir de un permiso estatal. Guillen ya había sembrado su camino de descontento cuando a pesar de enormes presiones demócratas fue el único en la asamblea estatal que voto recientemente a favor de prohibir los abortos. Los demócratas predijeron que ese sería el final de Guillen, pero lo mas extraordinario es que se equivocaron. En su distrito del Valle del Rio Grande su popularidad en lugar de caer subió casi 20 puntos, y con eso vino el golpe final, Ryan Guillen renunció al partido demócrata y se pasó al partido republicano.
Si, ya se que ocurrió en Texas. Pero aún en Texas esto es significativo.
Lo peor es que para los demócratas es también sintomático de un cambio serio y grande ocurriendo con la afiliación política de los latinos en las cuatro esquinas de este país. ¡Si! con esos mismos latinos que votaron por Donald Trump, a pesar de los insultos y las idioteces que Trump dijo sobre todos nosotros.
Aquí creo que es necesario hacer una aclaración. Estadísticamente los latinos que se están identificando mas con los republicanos son los hombres; las mujeres están cambiando partido también, pero a menor ritmo. A los jóvenes también hay que excluirlos, ellos siguen prefiriendo lo mas abierto de mente de los demócratas.
Las diferencias por género son importantes, consistentemente por casi una década el 60% de las votantes hispanas dicen estar convencidas que los demócratas se preocupan más por los hispanos que los republicanos, en comparación con solo el 48% de los hombres hispanos que votan.
Curiosamente entre las mujeres educadas latinas hay mas inclinación hoy por la derecha política, lo que no está claro es si es una cuestión ideológica, o si es que las mujeres latinas educadas se dan cuenta que el partido demócrata históricamente a los latinos, “Nos ha dado atole con el dedo.” Esta es una expresión mexicana que usted conoce porque representa un engaño histórico. Hay también un descontento con muchos demócratas latinos electos, que solo han usado a sus comunidades para avanzar sus carreras políticas, no para mejorar a quienes los eligieron, precisamente para que transformaran y mejoraran las vidas de sus electores.
El otro factor relevante hoy es que los votantes latinos inmigrantes tienen más probabilidades que los votantes nacidos en Estados Unidos de rechazar la ideología demócrata de que el gobierno debe regir en todo.
Por décadas nos hemos ido haciendo de patrones políticos, así por ejemplo los cubanoamericanos de la Florida son quienes están mas identificados con el partido republicano, pero hoy esa población ya creció para incluir a nuevos refugiados venezolanos y nicaragüenses que, vinieron huyeron de regímenes socialistas.
El otro factor son los evangélicos latinos que por naturaleza son conservadores y que simpatizan con la posición republicana al aborto, y los evangélicos lo que hacen es proletarizar para extender su influencia con sus seguidores latinos en todos los temas sociales.
Lo más difícil es explicar por qué los hispanos de tercera generación o más tienen más probabilidades de ser republicanos. Mark Hugo López, del Pew Research Center, ofreció algunas posibilidades, diciendo que sus estadísticas muestran que algunos son veteranos o tienen trabajos en las fuerzas del orden público o en los departamentos de bomberos, que se correlacionan con el voto conservador.
También nos habla de las influencias familiares, que los latinos especialmente están casándose con miembros de otros grupos raciales, y que eso influye en nuevas ideologías y preferencias políticas.
Por eso Trump no solo se aferró a los republicanos latinos tradicionales sino que convirtió a muchos de los que votaron por los demócratas en 2016 o 2018, y con eso se comió los márgenes demócratas entre los hispanos sin educación universitaria, creando un nuevo campo de batalla electoral.
Un dato adicional, es que más del 80 por ciento de los hispanos no tiene educación universitaria, pero tienen ambiciones. Muchos vienen de regímenes autoritarios y no ven al gobierno como una solución sino como un problema.
Ve usted, aquí se empieza a forjar la teoría de Reagan, que sabia que para los latinos el núcleo familiar es lo mas importante, que nuestras creencias religiosas se convierten en guía en la vida, que somos ambiciosos y que a Estados Unidos venimos a trabajar duro y a hacerla y muchos vean al partido republicano, no como el partido de los ricos, sino como el partido que les muestra el camino para hacerse ricos.
Por eso entre los hispanos de mas edad mucha de la ideología contemporánea encuentra resistencia. Lo único que había hecho difícil ver a los republicanos cómo opción habían sido sus teorías raciales y su abierta hostilidad a la migración latinoamericana… Esto último se hizo más abierto con Trump y aun así más del 30% de los latinos lo siguieron.
¿Tenia razón Reagan?
No, lo que ocurrió, es que a muchos latinos les pasó lo mismo que al expresidente, que un día también cambio de afiliación diciendo… “Yo no dejé al partido demócrata, el partido demócrata me dejó a mi”.
* Por casi tres décadas el periodista Armando Guzmán se ha ganado el reconocimiento en México y Estados Unidos por su cobertura en Washington. Puede seguirlo en los diferentes medios y plataformas, como radio, televisión, prensa escrita e internet.
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