ACLU demanda a Nebraska por las condiciones carcelarias en el estado

Denver (CO) — La filial en Nebraska de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) presentó hoy una demanda contra el Gobierno estatal por la “crisis de superpoblación” carcelaria, que ha creado “horrendas condiciones” para los reclusos.

“El sistema penitenciario de Nebraska tiene una crisis de superpoblación. Y esa superpoblación exacerba otros severos problemas ya existentes que amenazan las vidas y la salud de los prisioneros”, dijo Danielle Conrad, directora ejecutiva de ACLU Nebraska, en declaraciones enviadas a Efe.

“La falta de tratamientos adecuados de salud mental y física perjudica a los prisioneros mientras están en la cárcel, y cuando quedan en libertad les dificulta su reingreso a la sociedad. Necesitamos reformar el sistema penitenciario de Nebraska en todos sus niveles”, agregó.

Según datos oficiales, la población carcelaria de Nebraska es de unas 5.200 personas, un número considerablemente menor a los casi 160.000 reclusos en Texas, 136.000 en California, o 102.000 en Florida.

No obstante, la capacidad máxima de las cárceles de Nebraska es de 3.275 personas, un número muy por debajo del número de reos que en la practica habitan los centros penitenciarios del estado.

La demanda de ACLU Nebraska (un documento de 90 páginas con decenas de acusaciones y testimonios) también afirma que las cárceles carecen de suficiente personal y de recursos, que no ofrecen servicios médicos de manera adecuada, y que no proveen lugares acondicionados para presos invidentes o con problemas auditivos.

Además, la tercera parte de los presos cumple sentencias por delitos no violentos que en otros estados (como Texas y Oklahoma) son excarcelables.

De igual manera, en las cárceles de Nebraska el 28 % de los reclusos son afroamericanos, aunque los afroamericanos representan sólo el 5 % de la población estatal. En el caso de los hispanos, esas cifras son el 12 % y 10 %, respectivamente.

Hace ya diez años, cuando la población carcelaria de Nebraska superó la capacidad de los presidios, ACLU y otros grupos comunitarios ya habían pedido la intervención del gobernador y de la legislatura local para solucionar esa situación.

Desde entonces, dice la demanda, el problema se agravó y en la actualidad “rutinariamente se les niega a los prisioneros acceso a cuidados médicos mínimamente adecuados, se los mantiene en extremo aislamiento (incluyendo mujeres y jóvenes), se los expone a violencia, y se les niega acomodaciones a personas incapacitadas”.

Aunque presentada en nombre de once presos, ACLU pidió que la demanda incluya todos los presos del estado “presentes y futuros”, que el gobierno declare el “estado de emergencia carcelaria” en Nebraska y se modifiquen las leyes de sentencias para reducir así el número de reclusos.