Columna: Bell, Chen y Liu, seleccionadas para el equipo olímpico de patinaje artístico de EEUU

El abrupto fin de su compromiso el año pasado fue un duro golpe para Mariah Bell. Cuando se le pasó el susto, empezó a considerar la ruptura como una oportunidad para concentrarse en sí misma y cumplir su promesa como patinadora artística. Bell, de 25 años, aprovechó la oportunidad.

“No he venido hasta aquí para que todo ya pase”, dijo Bell sobre sus pensamientos en ese momento. “Volví a centrarme en mi sueño”.

Su enfoque la elevó a un nuevo nivel. El sábado, un día después de haber ganado su primer campeonato de Estados Unidos en su noveno intento, Bell fue nominada al equipo nacional para los Juegos Olímpicos de Invierno del mes que viene en Pekín. La subcampeona Karen Chen y Alysa Liu, de 16 años, también fueron seleccionadas.

Aunque Liu se retiró después del programa porque dio positivo por COVID-19, el comité de selección de Patinaje Artístico de Estados Unidos la eligió con base en sus títulos de 2019 y 2020 y a su sólido currículum. Lindsay Thorngren, Amber Glenn y Gabriella Izzo fueron nombradas suplentes.

“Esto es increíble”, dijo Bell, que entrena en Great Park Ice en Irvine. “Estoy muy emocionada. Sinceramente, es un sueño hecho realidad decir por fin que soy olímpica y que estoy en el equipo olímpico. No han sido los cuatro años más fáciles, pero estoy muy alegre”.

La nominación también cumplió un deseo de Chen, que terminó en un desalentador 11º puesto en los Juegos de 2018. “Quería tener mi historia de redención”, dijo.

Liu, hablando a través de Zoom mientras estaba en cuarentena en su hotel de Nashville, dijo que se sentía bien, pero que no sabía cuándo será dada de alta y se le permitirá volver a patinar. “Estoy muy emocionada. He estado entrenando desde siempre para este momento”, dijo.

Mariah Bell competes on her way to winning gold at the U.S. figure skating championships on Friday.

(Mark Zaleski / Associated Press)

Las perspectivas de las mujeres estadounidenses en Pekín no son las mejores, porque Kamila Valieva, de 15 años, y otras rusas de salto cuádruple son formidables. Pero Bell no ha llegado hasta aquí para dejar de creer ahora.

“Lo nuestro es hacer las cosas lo mejor posible”, dijo Bell. “Podría haber algunas sorpresas en la clasificación”.

Entre los hombres, sería decepcionante que Nathan Chen no ganara una medalla en Pekín. El tricampeón mundial (no tiene relación con Karen Chen) acumuló el sábado un récord nacional de 115.39 puntos en el programa de “La Boheme” que recuperó de hace dos temporadas, lo que le sitúa a medio camino de su sexto título consecutivo en Estados Unidos.

Fue especialmente impresionante porque no tuvo que competir en Nashville, donde alrededor de media docena de patinadores han tenido que ponerse en cuarentena después de dar positivo por el coronavirus. Chen, que fue quinto en los Juegos de 2018, podría haber ido a lo seguro y solicitar una plaza en el equipo de Pekín. Seguramente lo habría conseguido.

Pero Chen, que no había competido desde octubre, ansiaba una oportunidad más para ponerse a prueba antes de su esperado enfrentamiento olímpico con el japonés Yuzuru Hanyu, defensor del oro en dos ocasiones. Él la aprovechó al máximo, brillando en un concurso de alto calibre. Consiguió una puntuación máxima de 66.93 puntos por las suertes que ejecutó, incluido un salto de cuádruple volteo que le valió 4.87 puntos extra y una buena combinación de cuádruple lutz-triple toe loop.

“El programa corto de los Estados Unidos fue una locura”, dijo Chen, que también entrena en Irvine. “Todos los chicos hicieron un programa increíble”.

Vincent Zhou, que también hizo dos cuádruples, es segundo con una mejor marca personal de 112.78 puntos. En una sorpresa, Ilia Malinin, de 17 años, fue tercero con 103.46 puntos tras una impresionante actuación en dos cuádruples.

Five-time national champion Nathan Chen competes in the men’s short program Saturday.

(Mark Zaleski / Associated Press)

“Estoy agradecido de estar aquí, compitiendo con algunos de estos atletas de primer nivel”, dijo Malinin, cuyo nombre de usuario en Instagram es “quadg0d”. El equipo de Pekín, compuesto por tres hombres, se dará a conocer tras el patinaje libre masculino del domingo.

Jason Brown ocupa el cuarto lugar con 100.84 puntos, incluyendo una mejor puntuación de 49.15 en los componentes del programa (habilidades de patinaje, transiciones, rendimiento, composición e interpretación) en su rutina “Sinnerman”. Brown, que fue noveno en los Juegos de Sochi de 2014 pero no entró en el equipo de 2018, patinó después de Malinin y fue consciente de la calificación del joven. Pero Brown no domina los saltos cuádruples, así que no pudo cambiar su plan e ir a por más puntos. “Para mí, se trata de lo que puedes hacer en el momento”, dijo Brown.

Madison Chock, de Redondo Beach, y Evan Bates ganaron su tercer título de danza sobre hielo en Estados Unidos, superando a Madison Hubble y Zach Donohue por 227.37 a 225.59. Hubble y Donohue obtuvieron una puntuación más alta en la prueba de baile libre, pero no pudieron borrar la desventaja a la que se enfrentaron tras su titubeante danza rítmica. Ambos dúos serán probablemente nominados para el equipo de Pekín y deberían competir por una medalla. Los terceros clasificados, Kaitlin Hawayek y Jean-Luc Baker, tienen la vista puesta en 2026. “Siento que el impulso es bueno para nosotros de cara a Pekín”, dijo Bates.

Estados Unidos puede enviar dos parejas a Pekín, pero las medallas están lejos de su alcance. Ashley Cain-Gribble y Timothy LeDuc tienen posibilidades de ser nominados tras ganar los dos segmentos de la competencia y el título con 225.23 puntos, frente a los 209.87 de Irvine Jessica Catalang y Brian Johnson. Pero los campeones de 2021, Alexa Knierim y Brandon Frazier, que se retiraron después de que Frazier diera positivo por COVID-19, probablemente obtengan una plaza mediante una petición al comité de selección. Esas decisiones se anunciarán el domingo.

Lo que es seguro es que Bell, Chen y Liu pueden prepararse para hacer las maletas para Pekín. Bell, la mujer estadounidense de más edad que compite en individuales en los Juegos Olímpicos desde hace casi un siglo, dijo que su experiencia en la élite será una ventaja. “Es una especie de superpoder”, señaló. “Estoy contenta de estar preparada a los 25 años”.

Más vale relativamente tarde que nunca.

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