Poirier dice tener el corazón roto al no poder coronar un 2021 en el que derrotó a McGregor
LAS VEGAS, NEVADA — Después de vencer a Conor McGregor en dos ocasiones en 2021, Poirier pensaba coronar un año maravilloso con el cinturón. Dominó el primer asalto, pero luego se le vino el mundo encima en el segundo round y posteriormente fue sometido en el tercero por el campeón defensor de peso ligero, el brasileño Charles Oliveira en el evento principal de UFC 269.
“Trabajé mucho para regresar aquí, para pelear por un título del mundo. Para que me rindan otra vez por una guillotina. Tengo el corazón roto”, señaló Porier con los ojos llorosos el sábado por la noche en el T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada.
Poirier reconoció que el monarca mundial brasileño tenía mucha durabilidad, aunque sabía eso debido a su jiujitsu y su récord de sumisiones.
“El hombre es bueno, es el campeón”, añadió el estadounidense, quien también fue rendido también por una guillotina por el retirado Khabib Nurmagomedov en su anterior pelea de campeonato por la corona de peso ligero en 2019.
“Trabajé mucho, sacrifiqué mucho”, volvió a decir con una voz quebrantada. “No estoy acostumbrado a perder, pero no soy extraño a aprender”.
Poirier dio que la derrota no arruinó el año, pero sí truncó la oportunidad del título y que lo iba a tomar de esa forma.
Por su parte, Oliveira comentó que los rodillazos rindieron efecto cuando castigó a su oponente.
“No dejo que las oportunidades se me vayan”, expresó al hablar del tercer round letal en el que fue por el triunfo sin reservas.
Oliveira estaría enfrentando en su próxima defensa a Justin Gaethje.
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