John Thorrington, copresidente de LAFC, detalló la salida de Bob Bradley como entrenador

La temporada más corta en la breve historia del LAFC terminó lejos de los playoffs la semana pasada. Así que el jueves comenzó oficialmente lo que se perfila como la temporada baja más ajetreada del club, cuando el equipo se separó de Bob Bradley, el único entrenador que ha tenido.

“Cuando nuestra temporada llegó a su fin, lo que fue prematuro para nuestros estándares, tuvimos conversaciones con Bob y su agente. Y tras esas conversaciones, acordamos mutuamente que éste era el siguiente paso correcto para ambos”, dijo John Thorrington, copresidente y director general del club.

Bradley, el tercer entrenador con más triunfos de la historia de la MLS, llevó al LAFC a un récord de 58-34-32, tres apariciones en los playoffs y un Supporters’ Shield en cuatro temporadas. Su equipo rompió el récord de puntos en una temporada y empató la marca de goles de todos los tiempos en 2019, y luego llegó a la final de la Liga de Campeones de la CONCACAF la temporada pasada, cuando se convirtió en el primer equipo de la MLS en derrotar a tres clubes de la Liga MX en un solo torneo.

Pero LAFC, obstaculizado por las lesiones de jugadores clave, fue 12-13-9 y terminó noveno en la Conferencia Oeste este año, dos posiciones abajo de un puesto en los playoffs. Solo siete jugadores permanecen de ese equipo de 2019 y algunos de ellos no regresarán, algo que influyó en la decisión de Thorrington de hacer un cambio de entrenador.

“Después de cuatro años, creo que esta será una temporada baja más ocupada en términos de rotación”, indicó Thorrington. “El peor problema sería que nuestros jugadores no fueran lo suficientemente buenos y no jugaran bien, y tuviéramos que construir un equipo totalmente nuevo. No creo que sea eso a lo que nos enfrentamos”.

“Lo que creo es que estamos listos para pasar a esta siguiente fase de nuestra historia. E inmediatamente eso comienza con el proceso de identificar al próximo entrenador que va a ayudar a ir hacia adelante”.

Sin embargo, identificar al próximo entrenador puede no ser el final del trabajo pesado de Thorrington: también podría estar buscando un nuevo capitán. Aunque Thorrington se negó a hablar sobre los términos específicos del contrato, señaló que el equipo está en conversaciones con Carlos Vela, quien se ha perdido más de la mitad de los juegos de temporada regular del equipo desde su campaña de MVP en 2019.

“Estamos en conversaciones con Carlos en cuanto a lo que tiene sentido para el LAFC y para Carlos”, comentó. “Obviamente, ha sido un par de años difíciles debido a las lesiones. Pero estamos evaluando eso al igual que él”.

El contrato de Vela tiene una opción para 2022 que debe ser ejercida antes de fin de mes.

La carrera de Bradley se ha definido por breves, aunque exitosas, etapas en siete clubes y dos selecciones nacionales en tres continentes. Tres veces entrenador del año en la MLS ganó un título de liga con el Chicago Fire en su primera temporada como entrenador en 1998.

Dejó Chicago después de cinco años para hacerse cargo de los MetroStars, a los que llevó a los playoffs en dos temporadas completas. A continuación, llevó al Chivas USA a su primera aparición en la postemporada en su única temporada allí, antes de hacerse cargo de la selección nacional de Estados Unidos, a la que dirigió hasta los octavos de final del Mundial de 2010.

Después de ser despedido por perder ante México en la final de la Copa Oro de 2011, Bradley se embarcó en una minigira mundial, dirigiendo a Egipto hasta quedarse a las puertas de un Mundial en 2014 y dirigiendo a clubes de Noruega y Francia antes de una desastrosa prueba de 11 partidos con el Swansea City que lo convirtió en el primer hombre nacido en Estados Unidos tanto en entrenar como en ser despedido por un equipo de la Premier League inglesa.

La intensa personalidad de Bradley, combinada con su peripatético currículum, ha llevado a algunos a preguntarse si el entrenador y su mensaje pierden resonancia con el tiempo. Thorrington dijo que ese no era el caso con el LAFC.

“Cuatro años es mucho tiempo”, expresó. “Cuando uno observa los cuatro años completos, hemos logrado mucho de lo que nos propusimos. Tanto yo como el club estamos agradecidos por todo lo que Bob ha conseguido y ha ayudado a construir en estos cuatro años”.

“Cuando miro atrás y veo este año, no tengo la sensación de que los jugadores se hayan rendido o que no nos hayan escuchado ni nada parecido”.

Bradley es el duodécimo entrenador de la MLS que es despedido o dimite desde el final de la temporada pasada. Se le ha relacionado con el puesto vacante en Toronto, donde su hijo Michael es el capitán del equipo y su hermano Jeff es el director de comunicaciones.

Ahora que Bradley está fuera del LAFC, podría hacerse un anuncio pronto. Thorrington, por su parte, dijo que el proceso de búsqueda de un nuevo entrenador ya ha comenzado.

“Parte de mi trabajo es pensar a mediano y largo plazo. Y parte de eso es la planificación de la sucesión”, dijo. “No diría que ya tenemos candidatos, dado lo fresco que está todo esto, [pero] lo que sí sabemos es qué características se necesitan para tener éxito aquí”.

“Contamos con una lista única y muchos jugadores jóvenes que necesitan ser entrenados y desarrollados. Tenemos una cultura única, todas estas cosas entran en juego”.

To read this story in English, click here