Dustin May debe ajustarse rápidamente a los bateadores que conocen sus lanzamientos

Parece contraintuitivo. Dustin May tiene una de las bolas rápidas y eléctricas del juego, un desagradable lanzador de dos cañones que promedió 98,1 mph y a menudo tocó las 100 mph en 2020, pero para inducir más swing y contacto suave esta temporada, el derecho de los Dodgers planea reducir la intensidad de su lanzamiento característico.

“Sólo ser capaz de mezclar mejor los lanzamientos me ayudará”, dijo May, quien hará su debut en 2021 el lunes por la noche cuando comience la apertura de una serie de tres juegos contra los Atléticos en el Coliseo de Oakland.

“He sido tan dominante con la bola rápida en la zona con mi sinker, y [los bateadores] como que tienen una buena idea de eso - saben que es mi lanzamiento. Así que ser capaz de mezclar algunas bolas de ruptura en la zona ha sido realmente bueno”.

May, un larguirucho diestro de 1,80 metros y 180 libras de peso, con el pelo rojo, no está a punto de convertirse en un artesano como Greg Maddux. El nativo de Texas, de 23 años, todavía se apoyará en gran medida en su lanzador de dos cañones y en una bola cortada que promedió 93,6 mph la temporada pasada.

Pero planea aumentar el uso de su bola curva, que lanzó el 13,4% del tiempo en 2020, y el cambio de velocidad, que lanzó el 5,1% de las ocasiones en 2020, y experimentó fuertemente esta primavera con una bola rápida de cuatro costuras que tiene una velocidad similar a la de su lanzamiento de dos costuras, pero que se inclina idealmente hacia arriba en la zona de bateo.

El objetivo de May, que venció a David Price y Tony Gonsolin por el quinto puesto en la rotación de los Dodgers esta primavera, es ser menos predecible e inducir el contacto suave más temprano en los conteos, lo que debería ayudarlo a lanzar más profundamente en los juegos.

May se fue de 3-1 con un ERA de 2.57 en 12 juegos, 10 de ellos como titular, la temporada pasada, ponchando a 44 y caminando a 16 en 56 entradas, y tuvo un ERA de 4.22 en 10 2/3 entradas en siete juegos de playoffs - tres de ellos como titular - durante la carrera del equipo hacia el título de la Serie Mundial.

Pero la tasa de 7,1% de ponches por nueve entradas de May en la temporada regular fue muy inferior a la de la mayoría de los abridores de élite, que promedian al menos 10 ponches y hasta 14 ponches por nueve entradas.

“Creo que si miras el año pasado y su historial a través de las ligas menores, todo era duro, era una bola rápida superior a los 90 y el cortador duro, y realmente no utilizó la bola de ruptura o el cambio”, dijo el gerente de los Dodgers, Dave Roberts.

“Ahora, creo que el cambio de velocidad y la curva son parte de su arsenal, y se siente cómodo y confiado con ellos, especialmente cuando estás tratando de sacar a los bateadores dos y tres veces a través del orden”.

En su última oportunidad en primavera, en 5 1/3 entradas, tuvo una carrera, cuatro hits y 85 lanzamientos contra los Angels en la Serie Freeway el martes pasado por la noche, May lanzó 19 bolas rápidas de cuatro costuras, 16 para strikes, y 18 curvas, seis para strikes.

Aunque tuvo problemas con el comando de su bola de ruptura, que promedió 85.0 mph, May ponchó a Albert Pujols con una curva en la zona baja en la cuarta entrada.

“Me impresionó mucho la forma en que él y Will [Smith, catcher de los Dodgers] se quedaron con la bola de rompimiento”, dijo Roberts. “La curva no era buena al principio, pero en el último par de entradas la estaba golpeando, acortando y consiguiendo swings, así que fue una salida realmente alentadora”.

El reto de May al entrar en su tercera temporada con los Dodgers será lanzar su curva con tanta convicción como lanza su bola rápida.

“Estaba como acariciándola allí [contra los Angels]”, dijo May. “Tengo que seguir diciéndome a mí mismo que la lance. Todo lo demás está funcionando. Sólo tengo que dominar mejor la bola de ruptura”.

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