California busca la revocación inmediata de los cambios en el Servicio Postal de EE.UU
California busca la revocación inmediata de los cambios en el Servicio Postal de EE.UU, que causaron retrasos generalizados en la entrega del correo, y expresó su preocupación de que la votación por vía postal se vea obstaculizada antes de las elecciones del próximo noviembre.
La medida legal, anunciada el jueves por el procurador general Xavier Becerra, se conoce luego de los artículos publicados en The Times y otros medios sobre la presencia de comida podrida y animales muertos en paquetes almacenados en las instalaciones de correo, y clientes que han pasado largos períodos sin ingresos y sin medicamentos cruciales debido a las demoras.
También se produce justo después de que el miércoles el director general de correos, Louis DeJoy, recibiera una citación del Congreso para proporcionar registros sobre los retrasos en el correo y su nombramiento para el trabajo, así como su calendario y las comunicaciones entre él y la campaña de Trump.
DeJoy, ex ejecutivo de logística y donante importante de los republicanos y el presidente Trump, se convirtió en un punto focal para los demócratas preocupados por los repetidos ataques del primer mandatario a la votación por correo y a su afirmación de que el Servicio Postal no debería recibir un rescate de emergencia porque él desea limitar el número de estadounidenses que opten por sufragar de esa manera.
La moción para una orden judicial preliminar de Becerra -que actúa como parte de una coalición multiestatal de fiscales generales que demandaron a los líderes de DeJoy y del Servicio Postal por los cambios- es un intento de deshacer las modificaciones de inmediato, en lugar de esperar la resolución de la demanda existente, que acusa a la administración Trump de intentar obstaculizar al Servicio Postal antes de las elecciones.
“El Servicio Postal de Estados Unidos es una institución del país. Para muchos, es un salvavidas: su Seguro Social o cheques de pago, sus medicinas, su conexión con sus seres queridos. Y para un gran y creciente número, es su derecho a la democracia”, indicó Becerra en un comunicado.
Los demócratas criticaron los cambios que incluyen la orden de que los camiones de reparto de correo salgan exactamente a tiempo y eviten viajes adicionales, prácticas que han derivado en retrasos. La directiva va en contra de una antigua costumbre del Servicio Postal de que el correo no se puede dejar sin procesar, incluso si eso significa que los trabajadores deban quedarse hasta tarde o hacer viajes adicionales.
En las instalaciones de correo del sur de California, incluida una planta de procesamiento y distribución en el sur de Los Ángeles, un aumento en el volumen de paquetes y una reducción de las horas extras, combinados con el horario de transporte más estricto, crearon un caos, afirmaron los trabajadores. Según ellos, los paquetes comenzaron a acumularse en julio. Pronto, la cantidad era tan grande que las cajas permanecían sin clasificar durante días, algunas con carne y otros alimentos perecederos pudriéndose en el interior.
Durante las audiencias en el Congreso el mes pasado, DeJoy declaró bajo juramento que los únicos cambios que había ordenado personalmente en el Servicio Postal eran una reorganización ejecutiva y un mandato de que los camiones de la agencia se ajustaran a sus horarios y partieran a tiempo.
Otros cambios que se destacaron en las noticias -incluida la eliminación de las cajas de recolección azules y las máquinas clasificadoras de correo- eran parte de planes a largo plazo en la organización, que precedieron a su mandato. El correo de primera clase ha estado en declive durante mucho tiempo, señaló, lo cual provocó la eliminación de los clasificadores de correo. “No tuve nada que ver con las cajas de recolección, las máquinas clasificadoras, el horario de la oficina de correos o la limitación de las horas extras”, aseguró en la audiencia.
DeJoy, quien asumió el cargo el 15 de junio, afirmó el 18 de agosto que suspendería algunos cambios operativos hasta después del 3 de noviembre para evitar la apariencia de interferir con las elecciones. Pero dijo que no planeaba revertir su requisito de que los camiones partan a tiempo o que se eviten viajes adicionales. “No sabría cómo revertir eso ahora”, argumentó. “¿Debo decir, ‘No hagan funcionar los camiones a tiempo?’”.
Una auditoría realizada por el inspector general del Servicio Postal que se dio a conocer la semana en la cual DeJoy ingresó descubrió que la agencia gastó $280 millones en el año fiscal 2019 en costos de transporte tardíos y adicionales, una cantidad “absolutamente asombrosa”, dadas sus finanzas, indicó DeJoy.
El director general de correos señaló que desde que impuso el requisito de horario más estricto, la puntualidad de los camiones de la agencia ha aumentado del 88% al 97%, y los viajes tardíos se redujeron de 3.500 a 600 por día. “Tuvimos algunos retrasos en el correo”, comentó. “Nuestro proceso de recuperación en esto debería haber sido de unos pocos días, pero está previsto que sea de unas pocas semanas”.
El funcionario añadió que no había cambiado la política de horas extras de la agencia desde que se convirtió en director general.
Un memorando del Servicio Postal de amplia circulación, que decía que las horas extras pronto serían eliminadas porque no era “rentable” no había sido enviado bajo sus órdenes, señaló DeJoy. Además, agregó que desconocía cuál de los 50.000 gerentes de la agencia lo había enviado y que “no intentó averiguarlo” intencionalmente.
Un portavoz del Servicio Postal no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios, el miércoles.
The Times está recopilando información de los lectores sobre problemas con el Servicio Postal y también desea escuchar a quienes trabajan para la organización.
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