California arrendó 15.000 habitaciones de hotel para ayudar a las personas sin hogar. La mitad están vacías - Los Angeles Times
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California arrendó 15.000 habitaciones de hotel para ayudar a las personas sin hogar. La mitad están vacías

Omar Spry of Los Angeles Housing Community Investment Department, pushes a cart of residents' bags into a West L.A. hotel that has been turned into housing for homeless people during the coronavirus pandemic.
Omar Spry, del Departamento de Inversión Comunitaria + Vivienda de Los Ángeles, empuja un carrito con las bolsas de los residentes a un hotel de West L.A. que se convirtió en vivienda para personas sin hogar durante el brote de coronavirus.
(Myung J. Chun / Los Angeles Times)
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Hasta el lunes, 7.919 habitaciones de hotel estaban ocupadas y otras 7.700 se encontraban vacantes, según las cifras publicadas por la oficina de Newsom.

Sólo alrededor de la mitad de las 15.000 habitaciones de hoteles y moteles que California ha arrendado para la mayoría de las personas sin hogar para frenar la propagación del coronavirus ahora están ocupadas, según una revisión de los registros estatales del Times.

Más de un mes después del inicio del programa del gobernador Gavin Newsom para sacar a las personas sin hogar de las calles, las habitaciones ocupadas representan, como máximo, menos del 5% de los 151.000 individuos que duermen en las esquinas, debajo de los puentes y en refugios de emergencia en California.

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El número real de habitaciones alquiladas para personas sin hogar en el programa estatal conocido como Project Roomkey podría ser aún más bajo, ya que el objetivo de Newsom también incluía habitaciones reservadas para individuos, sin hogar o no, que necesitaban ponerse en cuarentena o aislarse debido al coronavirus.

Lo que Newsom lanzó a principios de abril como un esfuerzo coordinado para abordar la falta de vivienda durante la pandemia ha dado resultados mixtos. Pero, en general, ha progresado tan lentamente que no ha cumplido con muchas expectativas y es poco probable que proporcione la ayuda que necesita la gente que vive en las calles.

En algunos condados, los mayores impedimentos han sido los retrasos en la preparación de habitaciones alquiladas para su ocupación, no como se ha quejado el gobernador, los intereses de NIMBY (gente que no los quiere ahí) a nivel local. En otros condados, ha habido una escasez de personal para atender a los residentes sin hogar, proporcionando servicios de alimentos, seguridad, enfermería y gestión de casos.

“Este no ha sido un desafío de arrendar hoteles”, dijo el alcalde de Sacramento, Darrell Steinberg, quien es copresidente del grupo de trabajo sobre personas sin hogar del estado. “El desafío es mucho más un número insuficiente de proveedores de servicios para lidiar frente a un grupo bastante mayor de individuos y sobre la reubicación”.

Según el programa, los funcionarios del Condado son responsables de determinar cuántas habitaciones se reservarán para las personas sin hogar. Pero la implementación real del Proyecto Roomkey está obligando a los funcionarios de muchos condados a cuestionar cuántos desamparados “puede atraer el programa”, señaló Steinberg. Esto se debe a que no hay suficientes proveedores de servicios para ayudar a administrar los hoteles y, finalmente, apoyar en la transición de los residentes a una vivienda permanente.

El condado de Sacramento está mejor que el estado en general, con dos tercios de las 420 habitaciones que alquiló ahora ocupadas. Pero debido a la acumulación de personas que esperan una habitación, se ha retrasado la firma de contratos de arrendamiento de otras 570 habitaciones, expuso Steinberg.

Es una situación que aún no ha surgido en el condado de Los Ángeles, donde el ritmo se ha establecido por la rapidez con que los negociadores han podido firmar contratos de arrendamiento con hoteles y moteles. La Autoridad de Servicios para Personas sin Hogar de Los Ángeles ha llenado la mayoría de las habitaciones dentro de los dos o tres días posteriores a su disponibilidad. Pero eso podría cambiar a medida que la agencia encuentre que las filas de proveedores de servicios locales están disminuyendo.

“Francamente nos estamos acercando a entender cuál es la capacidad de nuestro sistema”, manifestó la directora ejecutiva interina de LAHSA, Heidi Marston. “Nuestros grandes proveedores [de servicios] se están estirando. Esa es una preocupación muy real. A menos que podamos aportar más capital humano para hacer este trabajo, nos será difícil continuar ampliando la capacidad”.

El Proyecto Roomkey está financiado en gran medida por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, que ha prometido reembolsar al estado y a los condados individuales el 75% del costo del alquiler de habitaciones de hotel y la prestación de servicios.

Sólo son elegibles las personas sin hogar que cumplen con ciertos criterios, como ser mayores de 65 años y tener condiciones de salud que los hacen susceptibles de morir por COVID-19.

Sin embargo, nada más las habitaciones que están ocupadas se encuentran cubiertas por FEMA bajo el programa. Y aunque no está claro si algunos condados están pagando a los propietarios de hoteles por habitaciones que han alquilado pero que no han llenado, eso no está sucediendo en el condado de Los Ángeles.

El objetivo del programa de arrendar 15.000 habitaciones sería suficiente para albergar aproximadamente el 10% de la población sin hogar estimada de California, una cifra que está muy por debajo de la cantidad total de individuos sin vivienda en el estado que tienen 65 años o más o que padecen afecciones médicas crónicas como del corazón o diabetes.

Sólo en el condado de Los Ángeles, las autoridades identificaron a 15.000 personas, una cuarta parte de la población sin hogar del Condado, que cumplen con los criterios de edad o salud y establecieron ese objetivo. Hasta el lunes, el Condado había asegurado 3.245 habitaciones y trasladado a los huéspedes a 2.102.

Los datos estatales proporcionados por la oficina de Newsom el lunes mostraron que dos grandes condados del Sur de California tienen más problemas para llenarlos. San Diego ha ocupado sólo alrededor del 20% de las 2.029 habitaciones que tiene en arrendamiento, y el condado de Orange un poco menos del 30% de sus 666 habitaciones.

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Un alto funcionario de la administración de Newsom le dijo al Times que el estado estaba muy orgulloso del ritmo y la escala con que los condados han llevado a las personas sin hogar a hoteles y moteles. Es un esfuerzo que tomó semanas y de lo contrario habría tomado meses o años.

Los datos del estado no especifican cuántas de las habitaciones arrendadas son para aquellos que necesitan cuarentena o aislamiento para COVID-19, a diferencia de los que no tienen hogar.

Craig Sturak, portavoz del Departamento de Salud del Condado de San Diego, dio cifras ligeramente diferentes a las del estado, y dijo el viernes que el Condado tenía alrededor de 1.700 habitaciones arrendadas y 370 ocupadas. Muchas de las camas estaban aseguradas antes de que comenzara el Proyecto Roomkey, dijo, “en previsión de una gran cantidad de casos de COVID-19 que no requerirían hospitalización pero que tampoco podrían aislarse en un lugar seguro”.

Alrededor de 200 de las 370 habitaciones son para personas sin hogar mayores de 65 años con problemas de salud subyacentes, apuntó.

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Sturak no explicó por qué tantas camas que podrían usarse para alojar a las personas sin hogar están vacías, incluso cuando miles permanecen en las calles, pero dijo que “hay otros recursos y programas para atender a los individuos sin vivienda que no necesitan el nivel de atención brindada en estas habitaciones”.

El Centro de Convenciones de San Diego, famoso por organizar los Comic-Con y otros eventos, alberga a casi 1.200 personas sin hogar durante la pandemia. La mayoría fueron llevados allí desde refugios estrechos, donde es más probable que el virus se propague.

Joel Jon Roberts, director ejecutivo de la agencia estatal de servicios para personas sin hogar y desarrollo de viviendas PATH, manifestó que los líderes de San Diego están muy conscientes de lo que podría suceder si se produce un salto repentino en los casos de coronavirus entre la población local sin vivienda.

Según el recuento de puntos en el tiempo exigido por el gobierno federal del Condado, 7.619 desamparados vivían al aire libre o en refugios a partir de enero, una caída del 6% respecto al año anterior.

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“Mi sensación es que están tratando de mantener las habitaciones abiertas en caso de un brote”, consideró. “Nadie sabe hasta cuánto podría llegar la cifra. Mire la ciudad de Nueva York y lo mal que ha estado allí”.

Además de administrar refugios en San Diego, PATH también brinda servicios en cuatro hoteles arrendados en el condado de Los Ángeles. Si bien ha podido llenar las habitaciones rápidamente, en algunos casos, le ha tomado más de dos semanas preparar las habitaciones después de la firma de los contratos de arrendamiento.

Más de 600 habitaciones desocupadas se encuentran en hoteles que aún no están listos para abrir, en algunos casos porque los antiguos huéspedes todavía no se habían ido o porque se necesitaban reparaciones.

Los negociadores de la ciudad y el condado de Los Ángeles han luchado por llegar a acuerdos con grandes hoteles cerca del centro de la ciudad, donde la mayor concentración de personas sin hogar vive en las calles de Skid Row. Incluyendo varios hoteles más pequeños en las cercanías del centro de la ciudad, hay suficientes habitaciones para menos del 4% de la población sin vivienda del área, según un análisis del Times.

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Pero los propietarios de algunos pequeños hoteles y moteles se han quejado de ser excluidos del proceso. LAHSA, que es responsable de operar los hoteles, ha pedido a los negociadores que apunten a propiedades de 100 habitaciones o más para facilitar la logística de la contratación de servicios de alimentos, seguridad, atención médica y gestión de casos.

Haciéndose eco de Steinberg, Roberts dijo que su agencia tuvo que luchar para encontrar personas con la capacitación adecuada para ayudar a administrar los refugios del hotel. Aún así, está muy satisfecho con la rapidez con la que han puesto en funcionamiento las habitaciones.

“No podemos simplemente, en una semana, contratar a 20 médicos para hacer este tipo de trabajo”, manifestó. “Por lo tanto, estamos aislando a las personas para atenderlas y buscando contratos”.

Al menos dos condados del Sur de California han superado a Los Ángeles en el llenado de habitaciones de hoteles y moteles, aunque ambos tienen poblaciones mucho más pequeñas de personas sin hogar.

Riverside, que alquiló habitaciones individuales en lugar de hoteles completos, ha asegurado 266 habitaciones y las ha llenado todas, una cifra que representa aproximadamente el 10% de su población sin hogar. El condado de Ventura comenzó a trabajar en habitaciones a mediados de marzo y tiene una de las tasas de éxito más altas del estado. Sus 388 habitaciones están ocupadas en más del 80%.

Tara Carruth, gerente de la agencia de supervisión de personas sin hogar del condado de Ventura, dijo que los propietarios de los hoteles estaban ansiosos por alquilar habitaciones y que el Condado proporcionaba personal. En total, el Condado identificó a unos 350 individuos que cumplían con los criterios de edad o salud para Project Roomkey, o aproximadamente el 27% de su población sin vivienda, y ha alquilado suficientes habitaciones para acomodar ese número y más.

Incluso a medida que las habitaciones se ocupen, el impacto del programa estatal será difícil de medir, en parte debido a la meta duplicada tanto del condado de Los Ángeles como del estado de sacar a 15.000 personas sin hogar de las calles, y la falta de datos precisos de esta población.

Reconociendo que el ritmo de arrendamiento de habitaciones y los límites en la dotación de personal para los servicios probablemente pondrán la meta del Condado fuera del alcance, Marston dijo que no retrocederá. Ha habido mucho entusiasmo por Project Roomkey a pesar de sus deficiencias.

“Creo que hay maneras de servir a 15.000 individuos”, manifestó Marston. “Hemos construido una capacidad asombrosa. Sigamos construyendo en el alcance que tenemos y proporcionemos las habitaciones para que podamos atender a más personas”.

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