Ordenanza hace ilegal rentar espacios a dispensarios de marihuana

Otro golpe para la comunidad de negocios que vende marihuana fue asestado este martes tras la presentación de una ordenanza que hace ilegal rentar espacios a los dispensarios que vendan la hierba.

La ordenanza surge de la Junta de Supervisores del condado de Los Ángeles como una enmienda a una prohibición que se encuentra en pie desde el 2011. Esta prohibición señala que la apertura de dispensarios es ilegal en las áreas no incorporadas del condado, pero no detallba que el alquiler de espacios es ilegal.

Para los residentes de algunas zonas donde existe la venta, este paso es crítico para tener vecindarios más seguros. Sin embargo, algunos vendedores se mostraron desalentados al señalar que ahora los enfermos que necesitan la planta, la van tener que comprar en el mercado negro.

La junta aprobó la introducción de la enmienda sin hacer comentarios con un voto de 4 a 0, la supervisora Sheila Kuehl se abstuvo de votar. No obstante, la ordenanza tendrá que volver a la junta para su aprobación en una reunión posterior aún no acordada.

Durante la introducción de la enmedida, quienes sí tuvieron comentarios positivos fueron algunos padres de familia.

“Esto es todo lo que necesitábamos para progresar hacia unos vecindarios más seguros”, dijo Paulina Ibarra, residente del sur Whittier.

“Si ahora las autoridades empiezan a revisar a todas esas personas que le rentan a los dispensarios, estoy segura que los propietarios lo van a pensar dos veces”, agregó Ibarra.

Aplaudiendo la acción de la junta, Pedro Ramírez, del sur El Monte sostuvo que si la enmienda es aprobada, los “niños no tendrán que presenciar esos lugares que actúan ilegalmente, fomentan el uso de las drogas y amenazan a las familias con el incremento de crimen”.

Al otro lado de la moneda, para Charlie “C”, quien tiene un dispensario en la ciudad de Los Ángeles, este es el segundo golpe que el condado les arremete a sus colegas de negocio. Y es que en febrero, la junta pidió a sus abogados redactar una ordenanza que prohibiría todo el cultivo, fabricación, pruebas de laboratorio y distribución de marihuana en áreas no incorporadas.

“Yo estoy seguro que los dispensarios no van a desaparecer. Al contrario, se van a terminar mudando a otros lugares porque hay mucha demanda. Además, la gente que no va a poder comprar su remedio localmente, lo va a tener que hacer en el mercado negro; los callejones, parques, lotes baldíos y esquinas solitarias”, sostuvo.